El puente está a punto de caer
El sector La Aguada del municipio Colina en el estado Falcón, tiene 14 meses sufriendo las consecuencias de los daños en el puente que comunica la comunidad con el resto de la entidad.
Irene Revilla || corresponsalía lapatilla.com
Habitantes de la zona viven constantes calamidades porque a la localidad tampoco llega agua por tuberías desde hace unos 15 días, por lo que dependen netamente de los camiones cisternas y estos no pueden pasar al sector porque no hay acceso.
Nancy González, vocera del concejo comunal de La Aguada, denunció que desde hace un tiempo la alcaldía de Colina apoyaba con camiones cisternas, pero desde hace un año ya no cuentan con ese beneficio, por lo que deben comprar agua y cargarla en tobos hasta sus hogares.
“Estamos viviendo un atraso total. Todo lo buscamos en la entrada y nos vamos a caminar hasta nuestras casas. Cuando llega el gas, es la misma situación. Imagínese caminar dos kilómetros con una bombona vacía para mandarla a llenar y luego volver a caminar los dos kilómetros para llevarla llena hasta la casa”, dijo.
Actualmente el puente está a punto de desplomarse, según informes del Ministerio de Transporte que llegaron a manos de los pobladores, razón por la cual ningún vehículo debería transitar por allí. Sin embargo, quienes tienen carros y viven en la zona, todos los días se encomiendan a Dios para trasladarse en sus carros hasta sus casas, ya que no pueden dejarlos en la entrada de la comunidad por seguridad.
Promesas incumplidas
La comunidad exige una respuesta
González dijo que han ofrecido soluciones en innumerables ocasiones, pero ninguna las han cumplido.
Tras la denuncia de que el puente estaba cediendo por falta de mantenimiento, las autoridades comenzaron a hacer un desvío provisional que no terminaron. Luego prometieron un puente de guerra del que solo han llevado algunas partes.
“En lo que va de año, no hemos tenido respuesta de ninguna institución. Ni la alcaldía ni la gobernación, que nos dio la promesa de construir un puente de guerra el año pasado, y hasta ahora solo han traído partes de él, lo que vendría a solucionar el problema”.
Esta es una situación de emergencia: se dificulta a los médicos llegar al ambulatorio, a docentes y estudiantes llegar a las escuelas. Hay que caminar largos trechos de día y de noche, porque no hay manera de que un transporte pueda pasar. “El llamado ya lo hacemos al gobernador del estado a que atienda a esta comunidad sumida en innumerables problemas”, concluyó.
