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Las recientes lluvias torrenciales en el noroeste de Corea del Norte inundaron miles de casas y una vasta extensión de tierras de cultivo, y dejaron a muchos habitantes sin hogar y viviendo en tiendas de campaña improvisadas, informó el miércoles la prensa estatal norcoreana.
Corea del Norte había dicho antes que más de 5.000 personas que quedaron varadas en la ciudad de Sinuiju y en la localidad de Uiju fueron rescatadas por aire y mediante otras labores de evacuación después de que las lluvias del sábado provocaran la crecida de un río en la frontera con China. Pero no mencionó daños concretos ni dijo si había víctimas.
El país es propenso a sufrir inundaciones provocadas por las fuertes lluvias estivales debido a un deficiente sistema de drenaje, a la deforestación y al mal estado de su infraestructura.
La Agencia Central de Noticias de Corea (ACNC) informó el miércoles que se habían inundado unas 4.100 casas, 3.000 hectáreas (7.410 acres) de campos agrícolas y numerosos edificios públicos, carreteras y vías férreas en Sinuiju y Uiju.
En la cercana provincia de Jagang, unas 150 personas quedaron también aisladas debido a la crecida de otro río, pero fueron evacuadas por helicópteros militares.
En una reunión de emergencia del politiburó en Sinuiju, el líder del país, Kim Jong Un, pidió a las autoridades que “castiguen severamente” a quienes, según él, descuidaron sus responsabilidades en la prevención de desastres y provocaron “incluso la víctima que no se puede permitir”, según informó la ACNC.
El reporte no precisó si “la víctima” era una única persona, como indicaría su significado literal, o varias. Tampoco indicó si se han reportado decesos.
De acuerdo con la agencia, los miembros del politburó aprobaron después el nombramiento de nuevos secretarios del Partido de los Trabajadores en las regiones afectadas por las inundaciones y de un nuevo ministro de Seguridad Pública.
Kim había dicho antes que la agencia norcoreana de respuesta a emergencias y el Ministerio de Seguridad Pública desconocían el número exacto de habitantes de las zonas afectadas, por lo que la cifra de rescatados era mucho mayor de lo esperado.
En la reunión, los funcionarios decidieron construir 4.400 nuevas casas, reforzar los diques en Sinuiju y Uiju y restaurar las instalaciones dañadas en la provincia de Jagang, añadió la ACNC.
Kim ordenó medidas urgentes para repartir entre los afectados los materiales almacenados para caso de desastre y pidió a los miembros del politburó que visitaran a los desplazados que estaban en tiendas de campaña para ofrecerles consuelo y constatar las condiciones en que se encuentran, reportó la agencia noticiosa.
La televisora estatal emitió imágenes en las que se veía a Kim y a otros funcionarios a bordo de lanchas neumáticas para examinar el alcance de los daños en las zonas anegadas. Se veían muchas casas sumergidas en aguas fangosas, donde solo se veían los tejados.
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