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El mandatario estadounidense, Joe Biden, anunció este miércoles que su administración «está listo» para poner en marcha un acuerdo con Panamá este mes de agosto, el cual permitirá la repatriación aérea de migrantes que atraviesen la selva del Darién. Esta declaración se dio tras una conversación telefónica con el presidente de Panamá, José Raúl Mulino.
Desde el Gobierno panameño, se emitió un comunicado donde se destacó que Mulino y Biden «mantuvieron hoy un diálogo telefónico en el cual abordaron distintos temas, entre ellos la crisis de Venezuela, la situación de la inmigración ilegal del Darién y el papel de Panamá como aliado estratégico en la región».
De acuerdo con el comunicado oficial de Panamá, Biden «se comprometió a iniciar durante agosto la implementación del acuerdo mediante el cual se iniciarán los vuelos de repatriación de los migrantes que llegan a Panamá por la selva del Darién, cuya financiación -según el memorándum de entendimiento firmado entre ambos países- correrá por cuenta de Estados Unidos».
El presidente estadounidense también enfatizó que su país «está listo» para llevar a cabo el acuerdo, el cual será implementado «respetando los derechos humanos y la dignidad de las personas», según afirmó Mulino en la nota oficial, que también menciona que ambos líderes acordaron mantener una comunicación directa.
El acuerdo, firmado el pasado 1 de julio, establece el retorno aéreo de migrantes que cruzan la frontera selvática con Colombia, una ruta diaria para muchos que buscan llegar a Norteamérica, y cuenta con un apoyo económico estadounidense de 6 millones de dólares.
Mulino, el pasado 8 de agosto, informó que los vuelos de retorno de migrantes que han cruzado la selva del Darién se dirigirán hacia Colombia, país fronterizo por donde ingresan estos migrantes.
Este plan busca disminuir el flujo de migrantes a través de la peligrosa selva del Darién, por donde ya han pasado más de 216.000 personas este año, en su mayoría venezolanos, superando ampliamente los más de 520.000 del año 2023, según cifras oficiales panameñas.
Desde el 3 de julio, Panamá ha instalado “barreras perimetrales” (vallas de alambre con púas) en aproximadamente 4,7 kilómetros del Darién, donde había al menos cinco pasos no autorizados, para “canalizar” a los migrantes hacia un “corredor humanitario”, reduciendo así el número de cruces en julio en comparación con el mes anterior.
Mulino ha señalado en varias ocasiones que el número de migrantes podría incrementarse dependiendo de los desarrollos posteriores a las elecciones del 28 de julio en Venezuela, dada la gran cantidad de migrantes provenientes de ese país caribeño.
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