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Mientras el mundo digiere la noticia del derrocamiento del gobierno del presidente de Siria, Bashar al-Assar, a manos de rebeldes del país que tomaron la capital el domingo, naciones de la región como Brasil y Argentina fueron de los primeros en reaccionar.
Los gobiernos de Cuba y Venezuela, aliados por años al gobierno de Assar, no habían reaccionado a los actuales acontecimientos hasta el momento de publicar esta nota.
Brasil
En un comunicado, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil expresó: «En este contexto, la administración del presidente Luiz Inácio Lula da Silva manifestó su respaldo a los esfuerzos encaminados hacia una solución política al conflicto, siempre que se respete la soberanía y la unidad territorial de Siria.
El texto indicó que el sábado, el gobierno de Lula había expresado su preocupación por «la creciente violencia en Siria y solicitó medidas para proteger tanto a la población como a las infraestructuras civiles en el país».
«Todas las partes involucradas a actuar con la máxima moderación y prudencia», instaron el sábado las autoridades brasileñas.
A su vez, el gobierno de Lula reafirmó su apoyo a una «solución política y negociada» al conflicto y destacó la importancia de respetar plenamente el derecho internacional, en particular el derecho humanitario, así como la soberanía y la integridad territorial de Siria. Además, reiteró su compromiso con las resoluciones pertinentes del Consejo de Seguridad de la ONU.
Argentina
El gobierno de Javier Milei, había enviado una alerta a los ciudadanos de Argentina para que abandonaran Siria en medio del «avance de los grupos rebeldes hacia Damasco».
«[Hacerlo] a la mayor brevedad posible», afirmaron las autoridades de Argentina a través del Ministerio de Relaciones Exteriores, liderado por Gerardo Werthein.
Además advirtieron que aquellos ciudadanos que decidan quedarse en Siria a pesar de la situación, tomen precauciones extremas y sigan de cerca la evolución de la seguridad en la zona.
“La Cancillería informa a los ciudadanos argentinos que el conflicto en el noroeste de Siria se ha agravado deteriorándose la situación de seguridad, por lo que se recomienda a los ciudadanos evitar todo viaje a Siria y abandonar el país a la mayor brevedad posible mientras las aerolíneas comerciales están aún operativas”.
Cuba
La estatal agencia de Cuba, Prensa Latina, informó el domingo que «tanto el Ejército como las fuerzas de seguridad entregaron sus armas antes de la llegada de la oposición para evitar más derramamiento de sangre».
El pasado 5 de diciembre, los cancilleres de Cuba, Bruno Rodríguez, y de Siria Bassam Sabbagh, hablaron por teléfono sobre lo que catalogaron «la escalada terrorista en el norte de Siria».
En la reunión, divulgada por el sitio en español de la agencia SANA, Sabbagh habría dado una detallada explicación sobre la magnitud de este ataque que fue previamente planeado y preparado, y en el que participó un gran número de terroristas extranjeros que reciben apoyo externo de partes regionales e internacionales que pretenden socavar al Estado y desestabilizar la seguridad y estabilidad de Siria.
Por su parte, el ministro cubano expresó la condena de su país al ataque terrorista contra algunas ciudades sirias, y el apoyo y la solidaridad absoluta de la mayor de las Antillas con el gobierno y pueblo sirios en el enfrentamiento a este terrorismo.
La embajada de Cuba en Turquía informó en su cuenta de Facebook sobre una reunión sostenida por el embajador cubano, Alejandro Francisco Díaz Palacios, con su homólogo sirio en territorio turco. «Sostuve un grato encuentro con el embajador de Siria a quien ratifiqué la solidaridad y amistad de de nuestro país. Intercambiamos sobre el acontecer internacional y las excelentes relaciones que existen entre nuestros dos pueblos y gobierno». Otros detalles no han sido informados sobre esa reunión.
El gobierno cubano no ha reaccionado de forma directa.
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