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El encargado de negocios de EEUU en Cuba, Mike Hammer, visitó este sábado en su hogar, en Santiago de Cuba, al líder opositor cubano José Daniel Ferrer, y se reunió allí con el pastor evangélico Lorenzo Rosales Fajardo, ambos recién liberados tras más de tres años y medio de cárcel por cargos relacionados con las protestas del 11 de julio de 2021 en la isla.
«Durante casi 5 horas conversamos sobre diversos temas de la realidad actual de nuestra patria y la importancia de la solidaridad de todo Occidente con el pueblo cubano que lucha por sus derechos y por la democracia», dijo Ferrer en una publicación en Facebook con fotos del encuentro.
Ferrer agradeció al gobierno del presidente Donald Trump, y al nuevo secretario de Estado de EEUU, Marco Rubio, por la solidaridad demostrada en los últimos días con la causa de los presos políticos en Cuba.
La solidaridad de EEUU
«Agradecemos la importante solidaridad del actual Gobierno estadounidense @potus @secrubio, y el interés por los presos políticos que continúan en terribles condiciones en cárceles por todo nuestro país», escribió en la red social.
Hammer también escuchó los testimonios del líder opositor santiaguero, y del pastor Rosales Fajardo, sobre los días que pasaron en prisión, reseña el portal web Martí Noticias.
En el encuentro, que tuvo lugar en el hogar de Ferrer, que sirve de sede a UNPACU, el alto diplomático de EEUU conversó además con la madre del preso político Iam Gámez Gell Estrella Gell, quien cumple prisión domiciliar.
Sostuvo también un encuentro con el sacerdote católico Camilo de la Paz Salmón, amigo de la familia de Ferrer, apuntó el opositor en el post en Facebook.
Hammer ha sostenido varios encuentros con activistas, opositores, familiares de presos políticos y líderes religiosos de Cuba desde su nombramiento como Encargado de Negocios en la embajada estadounidense en La Habana en noviembre de 2024. El alto diplomático se ha interesado en la situación de estas personas, sus preocupaciones y aspiraciones futuras.
La semana pasada, Ferrer denunció que desde su excarcelación, el pasado 16 de enero, es víctima del hostigamiento de la Seguridad del Estado. La policía política estableció un cerco alrededor de su vivienda, en el barrio de Altamira, para impedir el acceso de otros miembros de UNPACU. El opositor recibió además una citación del Tribunal de Ejecución de Santiago de Cuba para el 28 de enero, a la que no asistió.
En consecuencia, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) urgió al Estado cubano a que “adopte las medidas necesarias para garantizar la vida y la integridad personal» del opositor. Ferrer es beneficiario de medidas cautelares otorgadas por la CIDH desde 2012.
FUENTE: Martí Noticias
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