El Gobierno de Estados Unidos delegó al secretario de Estado, Marco Rubio, para manejar la imposición de aranceles del 25% a cualquier país que compre petróleo o gas de Venezuela.
Mediante su cuenta en Truth Social, el presidente de EEUU, Donald Trump, realizó el lunes el anuncio de la medida sobre el arancel y, posteriormente, en la orden ejecutiva se precisaron las funciones otorgadas a Rubio.
«El secretario de Estado, en consulta con el secretario del Tesoro, el secretario de Comercio, el secretario de Seguridad Nacional y el representante Comercial de los Estados Unidos, queda autorizado por la presente a determinar a su discreción si se impondrá el arancel del 25 por ciento a las mercancías de cualquier país que importe petróleo venezolano, directa o indirectamente, a partir del 2 de abril de 2025», establece la orden ejecutiva firmada por el mandatario y publicada en el portal web de la Casa Blanca.
La orden detalla que una vez sea impuesta la medida a discreción del secretario de Estado contra una nación, «el arancel del 25 por ciento expirará un año después de la última fecha en que el país importó petróleo venezolano, o en una fecha anterior si el secretario de Comercio, en consulta con el secretario de Estado, el secretario del Tesoro, el secretario de Seguridad Nacional y el representante Comercial de los Estados Unidos, así lo determina a su discreción».
Por su parte, el economista Francisco Rodríguez, expresó a través de su cuenta en X que esta decisión, en la práctica, «le otorga al secretario de Estado una herramienta extraordinaria para aplicar medidas comerciales punitivas con muy poca supervisión».
«Esto no tiene precedentes. Trump ya había invocado la Ley de Poderes Económicos de Emergencia Internacional (Ieepa) para imponer aranceles, pero delegar ese poder al secretario de Estado es nuevo. Le otorga a Rubio una autoridad discrecional para activar sanciones comerciales», advirtió.
Venezuela rechazó nueva agresión de Trump
Luego de la nueva agresión del presidente Trump, el Gobierno venezolano emitió un comunicado para rechazar la medida de manera firme y categórica, asegurando que es «arbitraria, ilegal y desesperada» y que lejos de afectar la determinación de la nación, confirma el fracaso rotundo de todas «las sanciones impuestas contra nuestro país».
Asimismo, destaca que EEUU con esta nueva acción viola flagrantemente las normas del comercio internacional y que Venezuela continúa firme en su camino para avanzar en su ruta de crecimiento y prosperidad, «junto a un pueblo que ha resistido con dignidad y ha derrotado» cada intento de sometimiento promovido por los sectores extremistas de siempre.