El Movimiento Por Venezuela (MPV) alertó este miércoles que las recientes sanciones impuestas por Estados Unidos al sector petrolero venezolano «agudizarán la crisis humanitaria en el país, generando mayor escasez de combustible, hiperinflación y desempleo».
En un comunicado, el partido señaló que estas medidas, que incluyen aranceles a compradores de crudo venezolano y la cancelación de licencias, «afectarán principalmente a la población».
«Estará nuestro pueblo sometido a una depauperación mayor, incrementando la presión para buscar salir al extranjero y poder sobrevivir, enfrentando cada vez mayor dificultad para emigrar. Los del Gobierno, tendrán sus estaciones de gasolina, bolsas de comida y se distribuirán los pocos recursos que se generen, mientras el común de la gente estará desesperada, buscando como sobrevivir en el día a día. ¿Alguien puede creer que así estaremos más fuertes para producir un cambio en nuestra nación?», reza el texto.
El grupo dijo que la «crisis» económica de 2016-2018 fue causada exclusivamente por «nefastas medidas económicas» del Gobierno de Nicolás Maduro, sumadas a «corrupción e ineptitud», y no por sanciones internacionales.
«Ya pasamos por todo esto en el 2016, 2017, 2018, cuando la crisis económica tocó fondo. Por cierto, para dejarlo bien claro: en esos años no había sanciones externas, las sanciones las impuso el gobierno de Nicolás con nefastas medidas económicas que destruyeron el aparato productivo del país, sumándole a eso la corrupción e ineptitud, que deterioró al máximo la industria petrolera y empresas de la CVG. Responsabilidad absoluta de su administración», sostuvo la organización.
Asimismo, indicó que «eliminar las licencias para la explotación y comercialización de petróleo e imponer aranceles a las naciones que compren crudo venezolano, será nefasto para toda Venezuela y nuestra gente, por las razones al comienzo señaladas, lo que impedirá mantenerse de pie, continuar su esfuerzo diario para vivir mejor, así como, alcanzar el cambio político y económico anhelado».
El MPV hizo un llamado al gobierno estadounidense para que «construya espacios de negociación que generen cambios positivos» y urgió a la administración de Maduro a «asumir su responsabilidad en la crisis y buscar una salida seria al atolladero nacional».
La organización reiteró su compromiso con la búsqueda de soluciones pacíficas y democráticas para superar lo que calificó como «estado de postración nacional», aunque insistió en que el Ejecutivo venezolano es el «máximo responsable» del colapso económico e institucional del país.
El pronunciamiento del MPV se produce en medio del reinicio de sanciones petroleras por parte de EE.UU., que incluye la revocación de la licencia que autorizaba a Chevron a operar en Venezuela y la imposición de aranceles del 25% a las naciones que adquieran crudo venezolano a partir de abril.
El gobierno de Nicolás Maduro ha calificado estas acciones como «arbitrarias, ilegales y desesperadas», argumentando que reflejan el «fracaso rotundo» de la política sancionatoria contra Venezuela.