Los viajes de los españoles a Estados Unidos han caído 15% debido a la incertidumbre generada por la guerra comercial desatada por la administración del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, según estimaciones del sector.
Según la Mesa del Turismo, que agrupa a un centenar de representantes del sector en España, esta bajada se produce a pesar de que la paridad euro/dólar en principio hubiera beneficiado la intención del viaje.
«Sorprendentemente, no se ha notado hasta el momento disminución del turismo estadounidense hacia España», según Juan Molas, presidente de la entidad.
Dentro de los países europeos, España es el menos perjudicado en la guerra de aranceles provocada por Trump, aunque la decisión de no viajar a Estados Unidos es «más rechazo hacia una política del presidente de los Estados Unidos de algunas personas que fueran a contratar el viaje».
Pese a la actual situación geopolítica, la Mesa del Turismo asegura que el sector turístico español afronta 2025 con «unas previsiones altamente favorables», impulsadas por un balance positivo del primer cuatrimestre y por los sólidos datos de ocupación en los principales destinos españoles que deja la Semana Santa.
Con todas las cautelas exigidas por coyuntura internacional económica y política, la Mesa prevé que España alcance en el conjunto del año entre 98 y 99 millones de turistas internacionales y que el PIB turístico crezca 3,6%, «manteniendo un claro dinamismo por delante del conjunto de la economía española».
El desglose de previsiones muestra un crecimiento leve del turismo nacional de 1,2% y más potente, de 4,5%, del internacional, según la entidad.
Como resultado de estas previsiones, la contribución directa del turismo al PIB español alcanzará 13,2% a final de año y la indirecta rondará 8% adicional, es decir 21,2 % entre ambas.