El candidato a la gobernación de Aragua, Luis Eduardo Martínez, afirmó que «la presentación del programa de gobierno es un compromiso» y, por lo tanto, instó a todos los aspirantes a cargos de elección popular a presentar sus propuestas de gobierno.
«Si hay algo que yo creo que en Venezuela se requiere es que los candidatos puedan presentar sus propuestas para que se conozcan y evalúen más allá de la militancia», indicó.
Asimismo, aseguró que será electo como autoridad de la entidad el próximo 25 de mayo porque él es «la única garantía de que ese estado salga adelante”. Además, aseveró que su gobierno “combinaría todos los elementos necesarios para que el pueblo aragüeño sienta que el gobierno que tiene es el mejor».
Martínez, quien es respaldado por 20 partidos políticos, destacó que «los primeros y más interesados para que yo sea el gobernador, son los sectores oficialistas». «Saben que conmigo estarán tranquilos, serán respetados y será verdad la necesidad de que Aragua se convierta en un referente de Venezuela», afirmó.
En el programa “Jesús Pregunta” de Globovisión, Martínez también calificó de “ingenuidad” la postura del gobierno y de las instituciones del Estado al dejar que los sectores del extremismo participen en las elecciones.
«Yo creo que se actúa con una gran ingenuidad cuando se le abren las puertas a quienes mañana pudieran ser promotores de una nueva conflictividad, porque ya lo fueron en el pasado y pudieran serlo mañana. La obligación de un Estado es defenderse y preservar la paz. Yo creo que nada más importante que la paz», ratificó.
Ejemplificó las medidas tomadas por países como Alemania, que hace unas semanas aprobó una ley donde prohíbe el ejercicio de actividad política de la extrema derecha; Italia, que también aplicó un conjunto de leyes donde nadie que se identifique con el fascismo de Benito Mussolini puede participar políticamente; España que actualizó su postura con la llamada Ley de la Memoria Histórica, por lo que, «es absolutamente legítimo que el Estado se proteja y proteja a sus ciudadanos, y no permita que haya la posibilidad de que se desate la conflictividad».
Por otro lado, el candidato refirió que debe existir una simbiosis entre el sector privado y el sector público para contribuir de manera decisiva a relanzar la economía en Venezuela.