El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, habló la noche de este sábado, tras ordenar el bombardeo contra tres centros nucleares en Irán.
En una breve declaración, felicitó al Ejército por atacar todas las instalaciones de enriquecimiento de uranio en la operación y exigió a Teherán un acuerdo.
El magnate republicano insistió en que de ahora en adelante debe prevalece la tranquilidad en Medio Oriente.
«Habrá paz o una tragedia para Irán mucho mayor que la que hemos presenciado en los últimos ocho días. Recuerden, aún quedan muchos objetivos por alcanzar», dijo.
Indicó que los centros de enriquecimiento de uranio han sido totalmente destruidos, incluyendo Fordox, la temida instalación subterránea que requirió hasta seis bombas antibunker.
«Hace tiempo decidí que no iba a permitir que esto continuara».
Trump calificó a Irán como “el matón de Oriente Medio” y advirtió sobre futuras acciones militares: “Si no hacen la paz, los próximos ataques serían mucho mayores y mucho más fáciles”.
Según el presidente, el operativo respondió a una amenaza persistente: “Durante 40 años Irán ha estado diciendo ‘muerte a Estados Unidos, muerte a Israel’”, expresó.
Y añadió: “Han estado matando a nuestra gente, volándoles los brazos, volándoles las piernas con bombas colocadas en las rutas”.
Además, dijo que trabajó “en equipo” con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y afirmó que la colaboración fue “quizás” como “ningún equipo ha trabajado antes”. Pero Trump también señaló que ningún ejército en el mundo, excepto el de Estados Unidos, podría haber llevado a cabo el ataque.
Según fuentes del Pentágono, los bombardeos se centraron en Fordow, un centro de enriquecimiento de uranio emplazado bajo una montaña fortificada. La ofensiva se llevó a cabo con bombarderos B-2, equipados con bombas perforantes GBU-57, de más de 13.000 kilogramos.EFE