La compañía energética Shell Plc se está preparando para reanudar los trabajos en el campo de gas Dragón, ubicado en aguas venezolanas, ante la expectativa de recibir una nueva licencia del gobierno de Estados Unidos que exima al proyecto de las sanciones. La información, publicada por la agencia de noticias Bloomberg, se basa en fuentes familiarizadas con el asunto.
El proyecto tiene como objetivo suministrar gas venezolano a la vecina Trinidad y Tobago, cuya industria de Gas Natural Licuado (GNL) y petroquímica enfrenta una escasez de materia prima. El campo Dragón se encuentra a pocos kilómetros de la infraestructura existente de Shell en Trinidad, lo que facilitaría su desarrollo.
El reporte de Bloomberg destaca que esta negociación se da en medio de una aparente «estrategia dual» de Washington, que por un lado mantiene una fuerte presión militar en el Caribe y por otro, permite gestiones para reactivar proyectos energéticos puntuales que beneficien a sus aliados en la región.
La condición clave para la aprobación de la licencia, según las fuentes, es que el proyecto no genere pagos directos de impuestos o regalías en divisas al gobierno de Nicolás Maduro. Este modelo es similar al que se aplicó en la licencia restringida otorgada a Chevron en julio de este año.
Esta postura fue respaldada por el secretario de Estado de EEUU, Marco Rubio, quien en una reunión el 30 de septiembre con la primera ministra de Trinidad y Tobago, Kamla Persad-Bissessar, expresó el apoyo de su país al proyecto, siempre que se garantice que «no proporcionará un beneficio significativo al régimen de Maduro».
Según el informe, Shell busca que la nueva licencia tenga una duración de hasta 10 años para facilitar las inversiones a largo plazo. De forma paralela, la compañía BP también estaría gestionando un permiso similar para el campo de gas Manakin-Cocuina, que se extiende a ambos lados de la frontera marítima.
A finales de 2023, el gobierno venezolano otorgó a Shell y a la empresa estatal de Trinidad un contrato de 30 años para desarrollar el campo Dragón. Hasta el momento, ninguna de las partes involucradas, incluyendo los gobiernos y las empresas, ha confirmado oficialmente el estado actual de las negociaciones para esta nueva licencia de EEUU.