Después de varios días de expectativa, la opositora venezolana María Corina Machado llegó finalmente a Oslo, Noruega, para recibir el Premio Nobel de la Paz, la noche de este miércoles (hora venezolana).
Aunque no pudo asistir a la ceremonia oficial, Machado se dejó ver desde el balcón del Gran Hotel alrededor de las 2:20 a. m. (hora local), saludando a los simpatizantes que la aguardaban mientras entonaban el himno nacional de Venezuela, Gloria al Bravo Pueblo. Esta fue su primera aparición pública desde enero de este año.
Más tarde, la dirigente se acercó a pie a los seguidores congregados frente al hotel. Entre gritos de “¡viva!” y celulares que la grababan, Machado interactuó con la gente, lanzando besos, abrazando a algunos y saludando con gestos de agradecimiento, aunque sin ofrecer un discurso en ese momento. Se espera que brinde declaraciones en una rueda de prensa junto al primer ministro noruego, Jonas Gahr Støre, en las próximas horas
La aparición sorpresiva de Machado se dio minutos después de que el presidente del Comité Nobel Noruego, Jørgen Watne Frydnes, anunciara que no habría encuentro con la exdiputada, ya que su prioridad era encontrarse con su familia, a la que no veía desde hacía dos años.
Machado, que vive en la clandestinidad desde las elecciones presidenciales de 2024, llegó con retraso respecto a su plan inicial debido a los obstáculos para salir de Venezuela. Aterrizó en el aeropuerto de Gardermoen alrededor de las 21:58 (hora local) y fue recibida por su hija Ana Corina Sosa, quien pronunció en su nombre el discurso de aceptación del Nobel, además de sus otros hijos, su madre y su hermana.
A pesar de la situación, Machado ha señalado su intención de regresar “muy pronto” a Venezuela.
El reconocimiento llega en un contexto de alta tensión entre Estados Unidos y Venezuela. El presidente estadounidense, Donald Trump, ha incrementado el despliegue militar en el Caribe y ha autorizado ataques contra presuntas narcolanchas, en los que han fallecido más de 80 personas.
Horas antes de la llegada de Machado a Oslo, Trump declaró que “no le gustaría” que la dirigente fuera detenida. “No me gustaría que la arrestaran, no estaría contento con eso”, afirmó al ser consultado por la prensa.
El mandatario aseguró no tener conocimiento de planes para detenerla, pero destacó que Machado “fue muy amable” al dedicar simbólicamente el Nobel de la Paz al momento de su anuncio.
En noviembre pasado, el fiscal general, Tarek William Saab, advirtió que Machado podría ser considerada “prófuga” en caso de abandonar el país, debido a diversas investigaciones penales que pesan en su contra.
Saab la señaló por presuntos “actos de conspiración, instigación al odio y terrorismo” y aseguró que la dirigente habría apoyado la presencia de fuerzas estadounidenses en el mar Caribe.
¡Oslo, aquí estoy! pic.twitter.com/tsixUerj0q
— María Corina Machado (@MariaCorinaYA) December 11, 2025
Con información de El Cooperante



