Los precios del crudo mostraron estabilidad este viernes en una jornada de bajo volumen de operaciones tras la Navidad. Los inversores se mantienen a la expectativa, sopesando los riesgos de suministro derivados de nuevas tensiones geopolíticas, tras los ataques aéreos de Estados Unidos contra militantes del Estado Islámico en Nigeria y el endurecimiento de la presión económica sobre la industria petrolera venezolana.
A las 11:48 GMT, los futuros del crudo Brent retrocedían 16 centavos, o un 0,26%, situándose en 62,08 dólares por barril. Por su parte, el West Texas Intermediate (WTI) de Estados Unidos descendía 7 centavos, o un 0,12%, cotizando en 58,28 dólares.
El mercado energético se encamina hacia su declive anual más pronunciado desde el año 2020, con el Brent y el WTI acumulando pérdidas del 17% y 19% respectivamente frente al cierre de 2024. Este escenario bajista responde al aumento de la producción tanto del grupo Opep+ como de países no miembros, lo que ha generado temores entre los analistas sobre un mercado en situación de superávit de cara al próximo año.
La presión sobre Caracas y el frente africano
Un factor geopolítico clave que el mercado está digiriendo es la reciente directriz de la Casa Blanca, que ordenó a sus fuerzas militares centrarse en una «cuarentena» del petróleo venezolano durante al menos los próximos dos meses. Esta medida indica que, por el momento, Washington está más interesado en utilizar medios económicos en lugar de militares para presionar a Caracas.
Paralelamente, en el continente africano, el presidente Donald Trump confirmó que Estados Unidos llevó a cabo el jueves un ataque contra militantes del Estado Islámico en el estado de Sokoto, al noroeste de Nigeria, en coordinación con el gobierno local.
A pesar de la acción militar en suelo nigeriano, la reacción de los precios fue contenida. June Goh, analista senior del mercado petrolero en Sparta Commodities, explicó la razón:
«Los ataques nigerianos promocionados por Trump tienen como objetivo al Estado Islámico y no impactan específicamente ningún oleoducto o terminal petrolera. Por lo tanto, los operadores se mantienen al margen en este mercado de escasa liquidez en el Boxing Day».
Es relevante destacar que los campos petroleros y la infraestructura de exportación de Nigeria, un importante productor mundial, se ubican principalmente en el sur del país, lejos de la zona del conflicto reportado en el noroeste.
Tong Chuan, analista de la firma Galaxy Futures, coincidió en que el bajo volumen es estacional: «Debido al cierre por las vacaciones de Navidad, la actividad del mercado de fin de año se mantuvo relativamente moderada». No obstante, advirtió que «las interrupciones por el lado de la oferta se han convertido en el principal impulsor de los precios del petróleo».
Expectativa por el diálogo Rusia-Ucrania
La atención de los inversores también se centra en los posibles desarrollos del proceso de paz entre Rusia y Ucrania y su impacto en los futuros del crudo, dado que un eventual acuerdo podría derivar en el levantamiento de las sanciones internacionales contra el sector petrolero ruso, alterando la oferta global.
El Kremlin informó este viernes que un asesor de política exterior del presidente Vladimir Putin conversó con miembros de la administración estadounidense tras recibir propuestas sobre un posible acuerdo de paz. Asimismo, el diario Kommersant reportó que Putin indicó a líderes empresariales rusos que Rusia podría estar abierta a un intercambio de territorios como parte del pacto.
Por su parte, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, declaró este viernes que muchas decisiones podrían tomarse antes de Año Nuevo y expresó su esperanza de reunirse pronto con Trump. Citando a un funcionario ucraniano, el medio Axios informó que ambos líderes se reunirán este domingo en Mar-a-Lago, aunque la agencia Reuters no pudo verificar inmediatamente esta afirmación.
Con información de Reuters.



