El jugador argentino del Sevilla FC, Lucas Ocampos (delante), pelea por el balón con el jugador albanés del Rayo Vallecano, Iván Balliu, durante el partido de la jornada 23 de LaLiga EA Sports, disputado entre el Rayo Vallecano y el Sevilla FC, en el Estadio de Vallecas, en Madrid. EFE/Juanjo Martín
“Es la primera vez que me pasa, ojalá no se manche un deporte tan lindo”. Lucas Ocampos sufrió una agresión inédita durante el primer tiempo del triunfo del Sevilla por 2 a 1 ante Rayo Vallecano por la fecha 23 de la Liga de España. El argentino se disponía a sacar un lateral junto a una de las plateas, de estrecha cercanía con el campo de juego del estadio de Vallecas, cuando un hincha local le introdujo un dedo en el ano.
Por Infobae
El delantero o mediocampista ofensivo, de 29 años, giró sobre su eje le reclamó al agresor, aunque sin devolver el ataque. Y convocó al árbitro para que interviniera, aunque su gestión fue por demás tibia, dado que no exigió la participación de la seguridad. Marcos Acuña, campeón del mundo con la Albiceleste y compañero de equipo, se arrimó a defenderlo y contenerlo.
No obstante, el grupo de agresores no fue removido del sector. Y el integrante de La Scaloneta (fue citado en la doble ficha de noviembre, en la que la Albiceleste perdió ante Uruguay y le ganó a Brasil en el Maracaná) debió reiniciar las acciones con los jóvenes a sus espaldas. De todos modos, antes de poner el balón en juego, volvió a reprocharles la repudiable actitud.
“Me contuve porque tengo dos hijas y ojalá que el día de mañana no les pase”, explicó cómo frenó su reacción. “Esperemos que tomen las represalias que tengan que tomar y ojalá que un tonto como este no manche a la afición que la verdad que se comportó muy bien”, concluyó Ocampos.
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