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Las fuerzas israelíes atacaron Gaza y combatieron a militantes de Hamás el viernes, mientras los esfuerzos de tregua no lograban avanzar y las tensiones aumentaron en la frontera norte de Israel con Líbano.
Testigos informaron de ataques en la ciudad sureña de Rafah y áreas centrales de la Franja de Gaza.
En el Hospital de los Mártires de Al-Aqsa en la ciudad central de Deir al-Balah, hombres se reunieron sobre el cuerpo de un niño de 11 años que murió durante un bombardeo al cercano campo de refugiados de Bureij.
El niño, que vestía una camiseta negra, yacía en el suelo manchado de sangre fresca, con una venda blanca cubriendo la mitad superior de su rostro, mostraron imágenes de AFP.
El ejército israelí dijo que las tropas continuaron las operaciones en el centro de Gaza, donde los aviones de guerra atacaron una célula militante en el área de Zeitun.
Testigos en Rafah, en la frontera sur de Gaza con Egipto, informaron de disparos de helicópteros, mientras que el brazo armado de Hamas dijo que sus militantes dispararon rondas de mortero contra tropas israelíes cerca del barrio de Tal al-Sultan.
La guerra comenzó después del ataque sin precedentes de Hamas el 7 de octubre en el sur de Israel, que causó la muerte de 1.194 personas, en su mayoría civiles, según un recuento de la AFP basado en cifras oficiales israelíes.
Los militantes también tomaron 251 rehenes. De ellos, 116 permanecen en Gaza, aunque el ejército dice que 41 están muertos.
La ofensiva de represalia de Israel ha matado al menos a 37.266 personas en Gaza, también en su mayoría civiles, según el Ministerio de Salud del territorio gobernado por Hamas.
El saldo incluye al menos 34 muertes en las últimas 24 horas, dijo el ministerio el viernes.
Escalada fronteriza
Los temores de un conflicto más amplio en Oriente Medio han aumentado nuevamente, con combatientes de Hezbolá con base en Líbano, que están respaldados por Irán y aliados con Hamas, lanzando oleadas de cohetes, misiles y drones contra objetivos militares israelíes.
Hezbolá dijo que los intensos ataques desde el miércoles fueron una represalia por el asesinato por parte de Israel de uno de sus comandantes.
Las sirenas sonaron en el norte de Israel, donde la policía dijo que las municiones habían caído en el área de Kiryat Shmona, sin informes de víctimas.
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