CARACAS.- La madre de Aníbal José Romero Salazar, uno de los manifestantes asesinados en Caracas, informó la mañana de este viernes, 2 de agosto, que a cuatro días de su muerte el régimen de Nicolás Maduro se niega a entregarle el cuerpo de su hijo.
La madre del joven, de 26 años de edad, desmintió al jerarca chavista, Nicolás Maduro, y a su fiscal, Tarek William Saab, quienes aseguraron que el asesinato había sido fingido, utilizando “salsa de tomate”, y presentaron en la televisión nacional a un sujeto que se hizo pasar por el manifestante asesinado.
En un video publicado en X, se puede observar a la mujer en estado de conmoción hablar sobre su hijo, apodado “Pimpina”, nacido en el estado Sucre (nororiente) y criado en San Juan de los Morros, estado Guárico (centro), quien se trasladó a la capital venezolana a trabajar para ayudarla por una enfermedad.
“Yo lo que quiero es que me entreguen el cuerpo de mi hijo, ya que mi hijo tiene cinco días y no he sabido nada de él. Lo que quiero es que me lo entreguen, para yo verlo por última vez”, pide la humilde mujer, quien se aprecia visiblemente afectada.
Asesinado por policías
Anibal José Romero Salazar, quien hubiese cumplido 27 años en octubre, fue asesinado el lunes 29 de julio en la popular barriada caraqueña de Carapita, parroquia Antímano (norte), durante la brutal represión de funcionarios de seguridad del Estado y colectivos armados.
“Yo estoy muy adolorida, me siento muy mal, y lo que le pido es eso, por favor, que me entreguen a mi hijo”, súplica su madre.
De acuerdo con información recabada por la ONG Provea, agentes de la Dirección de Acciones Estratégicas y Tácticas (DAET) de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) dispararon en contra de los manifestantes, que salieron a las calles en defensa de la soberanía popular expresada en las elecciones presidenciales del 28 de julio, en las que, según las actas de votación digitalizadas por la oposición, Edmundo González Urrutia habría sido electo presidente con más de siete millones de votos.
En el ataque, hirieron a Romero Salazar. Por más de media hora, según testigos, los funcionarios policiales impidieron que el joven fuera trasladado al Hospital General Dr. Miguel Pérez Carreño, cercano al lugar de los hechos, donde finalmente ingresó sin signos vitales.
Régimen banaliza asesinato de manifestante
Su asesinato, sin embargo, fue banalizado por la dictadura venezolana. En declaraciones a medios internacionales, el tirano chavista aseguró que la muerte fue un falso positivo, para «estimular el odio y decir que Maduro es un asesino, vamos por él”.
Maduro, además presentó a un doble, identificado como Albert Giuseppe Salazar Alvarado, quien aseguró que su presunta muerte había sido una simulación. “Como este caso hay varios, tenemos que hacer un esfuerzo por exponer la verdad, es un gran ataque sobre Venezuela”, agregó el dictador.
El fiscal chavista, Tarek William Saab, por su parte, se burló del asesinato, asegurando que las víctimas fingen sus heridas con “salsa de tomate” para simular la sangre. “Han simulado hechos punibles y van a ser detenidos por eso. Caen en el piso, le echan salsa de tomate a la persona en el suelo, algo jamás visto”, apuntó.
De acuerdo con el balance ofrecido por la Sala de Monitoreo de Graves Violaciones de Derechos Humanos del Comando Con Venezuela, en las últimas horas se han registrado al menos 22 muertes, calificadas como ejecuciones extrajudiciales, en los estados Aragua (centro), Bolívar (sureste), Carabobo (centro), Caracas (capital), Guárico (centro), Miranda (centro), Yaracuy (centro-norte), Táchira (suroeste) y Zulia (noroccidente).
FUENTE: Con información de redes sociales