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LA HABANA — El régimen cubano eliminó algunos de los estímulos de los que gozan las pequeñas y medianas empresas privadas cubanas, nacidas apenas hace tres años, según un decreto publicado este lunes por la Gaceta Oficial.
La nueva normativa se conoce después de que la dictadura anunció mano dura contra la «corrupción» y «evasión fiscal» y nuevas medidas para regular un sector que ha sacudido a una economía en profunda crisis y al que acusa de generar «tendencias negativas».
La dictadura comunista viene implementado desde diciembre una serie de duras medidas para lo que llama «corregir y reimpulsar» la economía de la isla, como un aumento de más de 400% al precio de la gasolina en marzo pasado.
Las nuevas normas publicadas este lunes eliminan la exención de pago de impuestos a los dueños o socios de negocios privados en su primer año de funcionamiento, explicó el portal de noticias estatal Cubadebate
Control bancario
«Registrar en su cuenta bancaria corriente todas sus operaciones» y «comercializar sus bienes y servicios en moneda nacional», son otras de las disposiciones del nuevo decreto.
Entre otras medidas, los pequeños y medianos empresarios deberán solicitar a la autoridad municipal autorización para abrir sus negocios, y tendrán el visto bueno «siempre que se encuentren en correspondencia con las estrategias de desarrollo municipal, solucionen otras necesidades del municipio o respondan a prioridades económicas».
Con una inflación galopante, el desplome del peso cubano en el mercado informal, bajos niveles de productividad, un abismal déficit fiscal (22% del PIB), escasez y falta de liquidez, la isla comunista, debilitada por los efectos de la pandemia y el reforzamiento del embargo de Washington, está sumida en su peor crisis en 30 años.
En un intento por paliar la escasez y dar respuesta a las demandas sociales durante las históricas protestas del 11 de julio de 2021, el régimen autorizó en agosto de ese año la empresa privada por primera vez en más de medio siglo.
Así, desde 2022 La Habana y otras ciudades del país han experimentado una explosión de pequeñas tiendas de comida y productos de primera necesidad, ante la imposibilidad del sector estatal de proveer muchos productos a la población.
Hasta junio pasado había casi 11.000 pymes registradas en el país de economía centralizada.
FUENTE: Con información de AFP
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