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Tres ciudadanos estadounidenses que estuvieron presos durante años en China llegaron a Estados Unidos el miércoles por la noche como parte de un intercambio de prisioneros entre Washington y Beijing.
El intercambio, que la Casa Blanca anunció el miércoles por la mañana, marcó un raro acuerdo diplomático entre Estados Unidos y China, en el momento en que el mandato del presidente estadounidense Joe Biden llega a su fin.
Beijing anunció el jueves que Estados Unidos ha devuelto a cuatro personas a China, incluidos al menos tres ciudadanos chinos que, según Beijing, fueron detenidos por «motivos políticos». El cuarto era un individuo buscado por las autoridades chinas por delitos que había estado viviendo en Estados Unidos.
El gobierno chino no identificó a las cuatro personas.
Los tres estadounidenses liberados en el intercambio —Mark Swidan, Kai Li y John Leung— aterrizaron el miércoles por la noche en una base militar en San Antonio, Texas.
Biden dijo a los periodistas el jueves por la mañana que había hablado con todos ellos.
“Estoy muy feliz de que estén en casa”, dijo.
Los tres estadounidenses habían sido designados como detenidos injustamente. Swidan se enfrentaba a una sentencia de muerte por cargos de drogas, y Li y Leung fueron encarcelados por cargos de espionaje.
En una medida separada pero relacionada, el Departamento de Estado redujo el miércoles su advertencia de viaje a China del “nivel tres” al “nivel dos”, y ahora aconseja a los ciudadanos estadounidenses que “ejerzan mayor precaución” cuando viajen a China.
Anteriormente, el Departamento de Estado aconsejó a los estadounidenses que “reconsideraran viajar” a China, en parte debido al riesgo de detención injusta de estadounidenses.
El intercambio de prisioneros se produce dos meses después de que China liberara a David Lin, un pastor cristiano de California que había pasado casi 20 años encarcelado en China tras ser condenado por fraude contractual.
Y en agosto, Estados Unidos participó en otro intercambio de prisioneros histórico.
Ese intercambio, entre Estados Unidos y Rusia, incluyó la liberación de los periodistas estadounidenses Alsu Kurmasheva y Evan Gershkovich, así como del ex marine estadounidense Paul Whelan y del residente permanente en Estados Unidos y líder de la oposición rusa Vladimir Kara-Murza.
[Parte de la información de este informe proviene de Associated Press y Reuters]
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