LA HABANA – El preso político cubano José Daniel Ferrer García inició una huelga de hambre tras ser trasladado a un destacamento donde las autoridades penitenciarias le impidieron acceder a los alimentos y agua que su familia le proporcionaba regularmente. Ferrer se rehúsa a consumir la comida de la prisión.
«En la tarde del jueves 5 de diciembre de 2024, la esposa e hijos de Ferrer acudieron a la prisión Mar Verde con la esperanza de tener una visita familiar después de 21 meses de negativas. Sin embargo, vivieron otro episodio de martirio, angustia y sufrimiento», relató Ana Belkis Ferrer, hermana del líder de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), en redes sociales.
El encuentro comenzó a las 5:00 pm (hora local), tras rechazar la mayor parte de los alimentos enviados en una jaba familiar. Según Ana Belkis, la reunión se desarrolló en condiciones deplorables: «apenas podían verse por la oscuridad del lugar, invadido por mosquitos», destacó.
«Huelga de hambre»
Autoridades del penal justificaron las restricciones señalando que Ferrer, al estar en un destacamento con presos comunes, debe cumplir el mismo reglamento, lo que incluye la prohibición de recibir agua embotellada. Esto llevó al opositor a declararse en huelga de hambre.
Ana Belkis denunció que desde junio de 2022 su hermano comenzó a sospechar que los alimentos del penal contenían sustancias nocivas. Por ello, decidió alimentarse únicamente con lo que su familia podía enviarle mensualmente. Además, recordó que el pasado 18 de noviembre, Ferrer fue brutalmente golpeado por seis carceleros, quienes le causaron heridas graves y lo ingresaron a un hospital lleno de reclusos con tuberculosis y sarna crónica.
«A la fuerza lo ingresaron en el hospitalito de la prisión de Boniato junto a reclusos con tuberculosis y sarna crónica; en dicho hospital fallecieron recientemente 22 reos por tuberculosis y leptospirosis, es tanta la hambruna que padecen que se comen los ratones», alertó.
«Amenazas»
En la última visita, la familia notó que Ferrer había sido trasladado a un destacamento improvisado donde comparte espacio con reclusos comunes. Además, la hermana del opositor denunció amenazas recientes del régimen contra los hijos de Ferrer, incluida la posibilidad de encarcelar a su hija de 20 años y separar al más pequeño, de seis.
El líder de la UNPACU, encarcelado inicialmente en la Primavera Negra de 2003 y posteriormente liberado bajo licencia extrapenal, ha hecho constantes llamados a la comunidad internacional para denunciar las condiciones inhumanas de los presos políticos en Cuba. Pese a los pronunciamientos de organismos como Amnistía Internacional, Human Rights Watch y Naciones Unidas, el régimen cubano sigue ignorando las exigencias de liberación.
FUENTE: Con información de Diario de Cuba