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El primer vuelo militar estadounidense que llegó a la Bahía de Guantánamo, en Cuba, con migrantes irregulares acusados de crímenes, tenía a bordo 10 miembros de la banda criminal Tren de Aragua, dijo el miércoles Karoline Leavitt, secretaria de prensa de la Casa Blanca.
Estos vuelos salieron desde la base militar ubicada en la ciudad fronteriza de El Paso, Texas, en un esfuerzo que Leavitt describió como prioridad para «la remoción de inmigrantes ilegales criminales violentos en comunidades de todo el país».
Kristi Noem, secretaria del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés) agregó tras la salida de los vuelos que «la bahía de Guantánamo albergará a los peores de los peores» migrantes irregulares acusados de crímenes.
Trump dijo que quiere que el Pentágono y el Departamento de Seguridad Nacional amplíen un centro de detención de migrantes en la base para albergar a más de 30.000 migrantes.
La organización internacional Human Rights Watch aseguró que esta iniciativa de la administración republicana «sugiere una intención de mantener a las personas en el limbo durante mucho tiempo.
Guantánamo es una instalación militar estadounidense remota y altamente controlada en el extranjero, que el gobierno estadounidense ha utilizado para evadir las protecciones legales y el escrutinio público».
Continúan arrestos de ICE, algunos son liberados
Leavitt detalló durante una conferencia de prensa que el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos (ICE, en inglés) ha arrestado a más de 8.000 migrantes indocumentados desde que Trump asumió la presidencia.
Además, informó sobre la identidad de algunas personas arrestadas, que incluyen un ciudadano de Nicaragua que fue condenado por agresión sexual, un ciudadano mexicano que fue condenado por agresión a un menor de edad, un ciudadano de México que fue condenado por homicidio vehicular y atropello, y un venezolano miembro del Tren de Aragua.
En medio de reportes de que algunos inmigrantes estaban siendo dejados en libertad, Leavitt confirmó que 461 migrantes irregulares «han sido liberados de la custodia» de las autoridades.
«Es menos del 6 % y hay razones para su liberación. Algunos de los factores incluyen la falta de probabilidad significativa de deportación en el futuro previsible, la falta de disponibilidad de centros de detención», dijo la portavoz de la Casa Blanca.
Finalmente, Leavitt informó que la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés), tiene aproximadamente 128 kilómetros de nuevos proyectos de muro fronterizo en la zona de EEUU vecina a México.
Estos proyectos, según dijo, estarían en etapas de construcción y planificación.
Trump firmó en su primer día de mandato una orden ejecutiva con la que declaró emergencia nacional en la frontera sur estadounidense. Este decreto establece que DHS debía hacer esfuerzos para «terminar el muro».
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