El Gobierno de Estados Unidos, en cabeza del presidente republicano Donald Trump, deportó a 238 presuntos miembros de la organización criminal venezolana Tren de Aragua hacia El Salvador para que sean ingresados al Centro de Reclusión para Terroristas (CECOT).
Entre los detenidos se encuentra Francisco Javier García, un joven venezolano de 24 años que, según su familia, se dedicaba al oficio de la barbería en Estados Unidos tras ingresar al país en 2023 procedente de Perú.
“Unos oficiales de (ICE) lo vieron, lo detuvieron por sus tatuajes… Le dijeron que lo iban a detener para investigarlo… Lo encerraron”, señaló a NTN24 su hermano Sebastián García.
Por otro lado, aseguró que mientras su hermano estuvo arrestado, tuvo un proceso judicial en el que lo obligaron a firmar una orden de deportación a Venezuela, pero no sin antes ofrecerle llegar a otro país, algo a lo que él se negó rotundamente.
“El juez le dijo que, como él no era una persona de alto riesgo, lo iba a dejar ir con un grillete para localizarlo cuando se reanudaran las deportaciones a Venezuela”, agregó.
Según el relato de su hermano, durante marzo el personal del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) acudió a la residencia del joven para llevarlo a un centro de detención. “Nos dijo que lo iban a trasladar, pero no sabía para dónde”, añadió.
Francisco Javier García firmó un documento en el que se le negaba el ingreso a Estados Unidos por 10 años, al tiempo que se preparaba para abordar un vuelo de deportación a su país que, entre otras cosas, fue cancelado por problemas climáticos a última hora, según narro su hermano.
“Teníamos la esperanza de que llegará aquí… En el transcurso del sábado, a eso de las 5:30 de la tarde, salió la información de que Bukele y el presidente Trump habían llegado a un acuerdo para llevar venezolanos a El Salvador… Lo único que se nos vino a la mente fue que lo llevaron para allá porque no habíamos tenido más respuesta de él”, aseguró.
Desde que surgió tal información, Francisco Javier García dejó de comunicarse con su familia, la cual estuvo atenta a lo que salía en las noticias, hasta que lograron identificarlo en uno de los videos difundidos.
“Pudimos identificarlo porque en el lado derecho de su brazo tiene tatuajes y en el otro no… Reconocimos sus orejas y su contextura… El instinto de un familiar no falla”, aseveró.
Finalmente, Sebastián García señaló que las autoridades no tienen ninguna prueba que vincule a su hermano Francisco Javier García con el Tren de Aragua. “No tiene ninguna reseña policial. Él salió de Venezuela en 2017, tenía 17 años”, concluyó.
