El futuro del Estatus de Protección Temporal (TPS) para más de 250,000 venezolanos pende de un hilo. La decisión ha sido pausada indefinidamente por el juez federal Edward Chen en un tribunal de San Francisco, afectando a un grupo de inmigrantes que podría perder su protección migratoria a partir del 10 de septiembre.
La Alianza Nacional de TPS y varios demandantes habían solicitado la restitución del beneficio migratorio que el gobierno de Joe Biden concedió a venezolanos en 2021 y 2023. Sin embargo, el juez Chen anunció una suspensión del proceso, a la espera de un fallo de la Corte de Apelaciones del Noveno Circuito.
Esta corte está evaluando una petición de la Administración Trump relacionada con el TPS. La semana pasada, esta misma instancia permitió a la administración republicana eliminar el TPS para 60,000 hondureños y nicaragüenses, y 7,000 inmigrantes nepalíes.
La decisión del juez Chen ha generado gran incertidumbre. Abogados de inmigración han expresado su preocupación, señalando que la suspensión afectará a miles de personas que pronto podrían perder sus permisos de trabajo y licencias de conducir. El abogado John De la Vega considera que esta situación debería ser tratada como una «circunstancia urgente» para emitir una resolución final.
La falta de una decisión oficial por parte del Departamento de Seguridad Nacional desde el 12 de julio ya había generado desasosiego entre la comunidad venezolana, que esperaba una extensión del programa que les permite vivir y trabajar legalmente en Estados Unidos.
El TPS, creado en 1990, ha protegido a extranjeros de 16 países. Sin embargo, los intentos de la Administración Trump por erradicar este beneficio han sido revertidos por jueces federales en casos similares para países como Afganistán o Ucrania, lo que deja una luz de esperanza para la comunidad venezolana.
Con información de El País