CARACAS.- La directora en funciones de Human Right Watch (HRW) Tamara Taraciuk resalta el rol que deben tener los gobiernos de Brasil, Colombia y México para resolver la crisis política en Venezuela y lograr una negociación con el régimen de Nicolás Maduro para que acepte los resultados defendidos por la oposición y finalmente pueda haber una transición democrática en el país caribeño.
Taraciuk hace un análisis de lo que fueron los acontecimientos pre y post elecciones presidenciales en Venezuela que le lleva a resaltar el papel del liderazgo asumido por la líder opositora María Corina Machado, quien a su juicio mostró «una astucia política que mucha gente no sabía que tenía» para lograr «conectar con la gente en Venezuela» como «no se veía desde que (Hugo) Chávez llegó al poder» en 1999. Luego, después del 28 de julio, día en que se celebraron las elecciones, «el mundo entero ya ha vistos esas actas de votación en las que la oposición obtiene el 67%… y lo que se le está pidiendo ahora es que respete esa voluntad popular», reseñó El Nacional.
En ese sentido, Taraciuk cree que «le queda muy difícil» a la comunidad internacional «apoyar a Maduro bajo esas circunstancias». Y es allí donde entra el rol «importante y de inmensa responsabilidad» de Colombia, Brasil y México, que -afirma- le han dejado claro al régimen que «no le compran el cuento». Sin embargo, Taraciuk considera que «deben hacer más».
«Hoy los gobiernos de Lula, Petro y López Obrador tienen la enorme responsabilidad de llamar las cosas por sus nombres y de dejar de hablar sobre Venezuela con eufemismos», dijo Taraciuk y explica que en el contexto de América Latina hay gobiernos que «no son coherentes porque sus decisiones en política exterior y derechos humanos están teñidas por una visión ideológica». Se refiere -dijo- a los gobiernos «de izquierda».
«No se trata de decir: hay que respetar derechos humanos, como acaban de decir en el más reciente comunicado. Lo que hay que decir es que no puede haber represión. Han metido a más de 2.000 personas a la cárcel, han muerto más de 20, están bloqueando redes sociales, adelantan una campaña de intimidación aterradora, se están llevando presos a miembros de la oposición. Las imágenes son escalofriantes», señaló.
La directora de HWR enfatizó que Lula, Petro y López Obrador «tienen que condenar esas acciones y pedir que acaben».
Asimismo, cree que no deben reconocer el resultado electoral del oficialismo y exigir, en cambio, una verificación de actas». Igualmente, Taraciuk los emplazó a «hablar con claridad y decir, en blanco y negro, que en Venezuela se robaron las elecciones. Y es importante que empujen por una negociación pero no para negociar un pacto de coexistencia política sino para una transición democrática en la que se concrete el ascenso de la oposición y la salida de Maduro. Acá hubo elecciones. Un grupo ganó y otro perdió. Y ese es el punto de partida para cualquier negociación».
Y añadió: «Petro, Lula y Obrador, son ellos los que tienen que hacerle entender al régimen que no van a poder gobernar bajo estas circunstancias ni mantenerse en la comunidad internacional».
El papel de EEUU
Taraciuk también destacó el rol de EEUU en una negociación con el régimen de Maduro. Recordó que es la justicia estadounidense la que lleva «la gran mayoría» de las investigaciones en contra de funcionarios del chavismo por corrupción, narcotráfico, lavado de dinero, entre otros crímenes. Considera, entonces, que EEUU «puede otorgar clemencias en procesos en curso y a sentenciados a cambio de pasos concretos para una transición democrática, entre hoy y enero, cuando tienen que entregar el poder».
«Es que le puedes ofrecer al que está en el poder que sea legal, aunque a muchos de nosotros nos revuelva el estómago, pero que permita abrir la puerta a una transición. Insisto, no va a ser posible con todos, pero sí con una mayoría. Hay que recordar que este no es un gobierno fuerte sino uno que está dando manotazos de ahogado», sostuvo.
Taraciuk insistió en que «es clave» que haya un consenso «no ideologizado» por parte de la comunidad internacional «y que se pongan sobre la mesa los incentivos legales… para ofrecerle salida a los distintos actores».
«El papel de Petro, Lula y López Obrador es crítico y su responsabilidad enorme, para bien o para mal. Sería indefendible, y acarrearía consecuencias internas y externas, que después de todo lo que ha pasado terminen siendo los que legitiman el fraude de Maduro», reclamó.
FUENTE: REDACCIÓN / Con información de El Nacional