Un déficit superior a los 1.500MW registrado en la noche del jueves en Cuba provocó apagones en hospitales en provincias, mientras autoridades prometieron «mejoría» en el servicio en los próximos días tras el supuesto «sacrificio» que dijo haber hecho el régimen al pagar por el combustible que permanecía en barcos sin poder despacharse.
El periodista oficialista Lázaro Manuel Alonso informó que el jueves en la noche las autoridades de las provincias de Matanzas y Villa Cara tuvieron que adoptar «medidas urgentes» por el alto déficit de generación, reseña Diario de Cuba
En el caso de Matanzas la Empresa Eléctrica determinó apagar un circuito donde está ubicado el Hospital Pediátrico de esa ciudad. Según la información compartida en el canal de Telegram y publicada por Alonso, la provincia sufrió afectaciones por 125 MW y procedieron a apagar el circuito 1453 del Pediátrico desde las 8:00PM hasta las 12:00AM, después de realizar «las coordinaciones previas de aseguramiento».
El aseguramiento no fue suficiente en el municipio de Vertientes, provincia de Camagüey, donde la falta de corriente eléctrica dejó apagado el hospital local.
«José, aquí ahora mismo hay pacientes graves, con falta de aire y mujeres embarazadas y se acaba de ir la luz a las 1:30 de la madrugada», dijo una fuente al periodista independiente José Luis Tan Estrada.
Tan Estrada fue informado de que la planta de la institución médica no funciona y era «imposible restablecer el servicio eléctrico». El reportero informó en una publicación anterior de 15 horas consecutivas de apagón en la ciudad camagüeyana durante la noche del miércoles.
Alonso, por su parte, escribió en Facebook que «se logró pagar el barco de combustible que irá a la generación distribuida».
El viceministro de Energía y Minas dijo al periodista de la televisión estatal Bernardo Espinosa que inició la descarga del combustible y su traslado a los emplazamientos. Dijo que «debe percibirse mejoría en el servicio eléctrico en los próximos días», algo que parece poco probable con la constante salida de centrales termoeléctricas.
El ministro de Energía y Minas, Vicente De la O Levy, intentó el miércoles aplacar el malestar por los apagones hablando de «sacrificios financieros» para llevar combustible a las unidades de generación en los próximos días y promesas de dejar instalados antes del fin de año los primeros 400 megawatts de los nuevos parques solares.
El jueves el país reportó afectaciones superiores a los 1.500 MW según cálculos basados en los reportes en Telegram de las empresas eléctricas provinciales, señaló Alonso.
El parte oficial de la estatal Unión Eléctrica (UNE) precisó que están fuera de servicio por avería la unidad 8 de la Termoeléctrica de Mariel; la 1 de Santa Cruz del Norte; la 4 de Cienfuegos; las 5 y 6 de Nuevitas; la 2 de Felton y las 5 y 6 de Renté. O sea, dos más que la pasada jornada y ocho en total.
Ni siquiera con el combustible que recibe La Habana desde Venezuela, México y Rusia, y las compras regulares en Europa, el sistema eléctrico es capaz de responder la demanda nacional. Las obsoletas termoeléctricas, con décadas de explotación y fuera de sus ciclos de mantenimiento, sufren averías constantes, lo que mantiene en vilo a los cubanos e impone presiones extra a la economía de la Isla.
FUENTE: REDACCIÓN/ Con información de Diario de Cuba