Aparatos quemados en los hogares y comercios quebrados: apagones causan estragos en Mérida
Los merideños viven una pesadilla diaria como consecuencia de los continuos apagones y la inestabilidad del servicio eléctrico.
Jesús Quintero / Corresponsalía LaPatilla.com
Los bombillos comienzan a mostrar altos y bajos en la intensidad cuando hay variación continua de voltaje lo que muchas veces provoca que se quemen casi instantaneamente.
En los hogares hay televisores, neveras, router de Internet, cualquier cantidad de aparatos eléctricos que terminan averiados por el impacto del voltaje.
Mientras tanto, el sueldo no alcanza para reemplazar los equipos dañados por unos nuevos, por lo que muchas veces terminan en la basura o esperan algún dinero extra para repararlos, porque la pensión o el sueldo mínimo no es suficiente para costear esos gastos.
En Mérida el plan de administración de carga no se cumple como es debido, por lo que los ciudadanos han reclamado en varias oportunidades por esta situación.
Los comerciantes también se han visto afectados pues las neveras y congeladores en los negocios han sufrido averías que en ocasiones no tienen reparación, lo que representa un golpe al bolsillo y al presupuesto.
En este orden de ideas, el presidente de la Cámara de Comercio e Industria del estado Mérida, José Miguel Monagas, ha mostrado preocupación ante la realidad que hoy día afecta a este importante sector económico, sin distinción alguna.
“Los cortes del servicio eléctrico en horarios laborales afectan la productividad de las empresas y la actividad comercial se mantiene por el piso, los ingresos producto de las ventas han disminuido considerablemente”, aseveró Monagas.
Actualmente en varios municipios de la entidad se aplica un Plan de Administración de Cargas, sin embargo, a juicio de los propios comerciantes, esta no es la solucion y la medida afecta el desarrollo de la actividad comercial diaria, porque los racionamientos se ejecutan durante las horas laborales.
Alejandro Briceño, es comerciante y se dedica a la venta de carne y productos charcutería en el centro de la ciudad, en la zona donde está ubicado su establecimiento no hay día que no quiten la electricidad, señaló que “los cortes son continuos, 4, 8 o 12 horas diarias sin servicio, mientras que para mantener la mercancía refrigerada optó por comprar bolsas de hielo y tenerlas dentro de las neveras.
Otra opción que también aplican es guardar las carnes en el “cuarto frío” y evitar estar abriendo y cerrando las puertas para que se mantenga a la temperatura deseada.
Sumado además a la pérdida de mercancía motivado a los prolongados cortes eléctricos y que por la naturaleza de los productos deben mantenerse refrigerados para su conservación.
A pesar de que han sido reiterados los llamados a los organismos encargados, esperan que la situación mejore en algún momento, de lo contrario señalaron que van directo a la quiebra porque no pueden mantener mercancía a riesgo de que se dañe, sumado a que las ventas están bajas, ya no hay la misma demanda de productos y rotación de la mercancía.