La justicia despejó el camino para que la exvicepresidenta y exmandataria argentina Cristina Fernández, la figura política más influyente en las últimas dos décadas, se erija en titular del peronismo opositor con el que quiere plantar cara al gobernante ultraderechista Javier Milei.
Una decisión judicial difundida el viernes zanjó por el momento la disputa interna del Partido Justicialista, en la que se enfrentaban Ricardo Quintela y Fernández de Kirchner.
La jueza federal María Servini de Cubría falló a favor de una decisión que previamente había tomado la Junta Electoral del partido peronista de invalidar la postulación encabezada por Quintela.
Tras el fallo, la nómina que lidera la expresidenta (2007-2015) y exvicepresidenta (2019-2023) quedó como la única habilitada para las internas en el peronismo del 17 de noviembre, dejándola a un paso de ser proclamada como titular de la fuerza.
La Junta Electoral había invalidado la postulación de la lista de Quintela — en la que estaba acompañado por varios candidatos a vicepresidentes —por considerar que no reunía los requisitos reglamentarios. Quintela es gobernador de la provincia de La Rioja, en el noroeste de Argentina.
Quintela había cuestionado la decisión tomada por la Junta Electoral de PJ, sin embargo, sobre eso, la jueza Servini de Cubría consideró que “la expresión de agravios debe estar respaldada de elementos probatorios”, que, según ella, no fueron presentados por el mandatario provincial.
Fernández de Kirchner se postuló en octubre para presidir el peronismo con el objetivo de “enderezar” esa fuerza opositora —la mayor del país—que sufrió un fuerte traspié con la derrota de su candidato presidencial Sergio Massa ante Milei en las elecciones de noviembre de 2023.
De esa forma la exmandataria lanzó el mensaje de que sigue en competencia en el escenario político, lo que podría incluir su postulación para el cargo de diputada o senadora las elecciones legislativas del próximo año, que serán una suerte de test para el mandatario ultraderechista.
Fernández de Kirchner, principal referente del Kirchnerismo, la corriente de centroizquierda del peronismo, fue condenada en 2022 a seis años de cárcel por fraude al Estado e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos, decisión que apeló. Además enfrenta otras causas judiciales.
Un tribunal de alzada decicirá próximamente sobre la condena, que no quedará firme hasta que la Corte Suprema diga la última palabra. Mientras tanto la exmandataria puede postularse a cargos públicos sin restricciones.
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