La caja de Pandora de la inteligencia artificial se abrió; ahora nos toca darle forma a ese futuro. ChatGPT, como un faro en la evolución tecnológica, nos advierte con contundencia sobre la vertiginosa velocidad con la que puede transformar nuestro mundo”
El 30 de noviembre del 2022 marcó un momento bisagra en la historia de la tecnología: el debut público de ChatGPT. En solo unos pocos días, este sistema de inteligencia artificial conversacional pasó de ser prácticamente desconocido a capturar la imaginación colectiva del mundo.
Conversando fluidamente sobre cualquier tema, citando datos precisos y generando texto coherente que imita la elocuencia humana, ChatGPT logró en una semana lo que a otras innovaciones les tomó años: llegar al primer millón de usuarios. Fue la aplicación de más rápido crecimiento en la historia.
Pero a la par del entusiasmo que despertó, también encendió airadas controversias. Expertos en seguridad alertaron sobre sus potenciales sesgos y la difusión de información falsa. Sindicatos previeron la automatización de trabajos creativos. Políticos debatieron frenéticamente su regulación y las leyes que hay que crear para que la inteligencia artificial sea usada con ética y no en contra de la humanidad. Todo en cuestión de días.
ChatGPT se había convertido, queriendo o no, en el rostro público de la acelerada carrera tecnológica por la inteligencia artificial que definirá las próximas décadas. Una especie de punto de partida en la cascada de eventos que ya se ha desatado hacia la web 3.0 y el metaverso.
Su debut prematuro, incluso sorprendiendo a sus propios creadores, dejó más preguntas que respuestas al mundo que conmocionó: ¿estábamos preparados para la acelerada evolución de la inteligencia artificial? ¿son más peligrosos sus prejuicios que sus posibilidades? ¿cómo evitamos sus riesgos al adoptarla?
Es importante reflexionar a un año de su creación y repasar el impacto que ha tenido ChatGPT además de analizar lo que nos depara la inteligencia artificial en un futuro cercano.
Influencia en política, medios y entretenimiento
La irrupción de ChatGPT en la escena pública a finales de 2022 causó una conmoción en el mundo de la política, los medios y el entretenimiento. Su capacidad para generar texto coherente de forma automática planteó preguntas sobre cómo podría afectar a estas industrias.
En política, ChatGPT entró con fuerza cuando el excandidato presidencial Chris Christie lo utilizó para criticar a su rival durante un debate televisado a nivel nacional en diciembre de 2022. Esto generó un intenso debate sobre el uso de inteligencia artificial en campañas políticas y si se estaba cruzando una línea ética.
Christie formaba parte del Partido Republicano, que en ese momento estaba en la oposición tras la victoria del demócrata Joe Biden en 2020. El uso innovador de ChatGPT por parte de Christie fue visto tanto como una ventaja competitiva por algunos, así como una potencial amenaza al proceso democrático por parte de sus críticos.
En el mundo del entretenimiento, ChatGPT rápidamente inspiró una trama en un episodio de la popular serie animada South Park a principios de 2023. Esto mostró cuán rápido la IA había entrado en la consciencia pública. South Park tiene un largo historial de satirizar temas de actualidad en la política y cultura estadounidense desde una perspectiva irreverente.
Mientras tanto, en los medios, el fenómeno ChatGPT no pasó desapercibido. Generaba más de 100.000 artículos, análisis y piezas sobre su impacto cada mes desde su lanzamiento. Como afirmó el experto en IA Henry Ajder, “ChatGPT ha dejado una enorme marca en la consciencia de la sociedad”. Esto se debía no solo a sus amplias capacidades, sino también a las profundas preguntas que planteaba sobre el futuro de los trabajos, la educación y la tecnología en la vida diaria.
ChatGPT entró con una fuerza sin precedentes en la conversación política, cultural y tecnológica mundial. Su amplio impacto en múltiples industrias está apenas comenzando a comprenderse.
ChatGPT: Beneficios y Desafíos en la Transformación Tecnológica Global
La irrupción de ChatGPT a finales del 2022 no solo causó una conmoción, sino que desencadenó un cambio sísmico en el panorama tecnológico global. La popularidad explosiva de esta inteligencia artificial generativa catapultó a OpenAI a valorarse por $29 mil millones a principios de 2023, consolidándose así como un actor clave en la escena tecnológica mundial.
Beneficios Exponenciales
El vertiginoso crecimiento de ChatGPT ha generado una intensa competencia entre empresas, desde gigantes tecnológicos hasta start-ups emergentes. Coca-Cola y Spotify son ejemplos paradigmáticos al integrar ChatGPT en el diseño de campañas publicitarias y en la recomendación de música, respectivamente. Este fenómeno condujo a la creación de 500,000 nuevas compañías vinculadas a la inteligencia artificial en cuestión de meses, según Pitchbook, evidenciando el impacto innovador de la tecnología.
La versatilidad de ChatGPT se manifiesta en sus habilidades para redactar, codificar software y contribuir al desarrollo de tratamientos médicos. Este impulso creativo y productivo promete generar un saldo neto de 500,000 nuevos empleos para el 2030, según PwC. La inteligencia artificial generativa no solo redefine la forma en que trabajamos, sino que también augura una demanda creciente de habilidades humanas, especialmente aquellas relacionadas con la creatividad y empatía.
Desafíos Inminentes
Sin embargo, este rápido avance no está exento de preocupaciones cruciales. Un 75% de encuestados teme la proliferación de noticias falsas y nuevos tipos de fraudes cibernéticos, revela Anthropic. Además, la falta de transparencia en los datos utilizados durante el entrenamiento de sistemas como ChatGPT genera inquietudes entre el 90% de los encuestados, según el AI Index 2022 del Instituto Allen.
El temor a la automatización masiva y la potencial pérdida de empleos humanos es palpable, con el 55% de los encuestados previendo la sustitución de roles laborales en pocos años, según Gallup.
Demanda de Regulación y Supervisión
La necesidad urgente de regulaciones en el desarrollo y uso de la inteligencia artificial (IA), en particular, ChatGPT, ha sido destacada por Sam Altman, CEO de OpenAI. Altman no solo testificó ante un comité del Senado de los Estados Unidos sobre las posibilidades y peligros de la nueva tecnología, sino que también propuso la creación de una nueva agencia encargada de otorgar licencias a las empresas de inteligencia artificial.
Altman, consciente de los peligros inherentes, ha advertido sobre los resultados potencialmente negativos de la aplicación de inteligencia artificial, especialmente en términos de desinformación a gran escala. La capacidad mejorada de ChatGPT en la redacción de código informático también suscita preocupaciones, ya que podrían ser utilizados para ciberataques ofensivos. Reconociendo la posibilidad de una pérdida significativa de empleos en el mercado laboral, Altman ha subrayado la necesidad de cautela y regulación para evitar posibles daños.
Conclusión: un nuevo capítulo en la historia humana
Reflexionar sobre el primer aniversario de ChatGPT nos lleva a una conclusión ineludible: la era de la inteligencia artificial ya está entre nosotros. Su llegada parece marcar un punto de quiebre similar a hitos como la electricidad, el automóvil o internet, que terminaron por reconfigurar economías, relaciones sociales y la política global.
Si en únicamente12 meses una red neuronal generativa fue capaz de instalar nuevos conceptos en el habla cotidiana, despertar ansiedades sobre el futuro laboral e inspirar reactores de políticas públicas, es razonable suponer que lo que viene podría sacudir las bases mismas de la civilización.
Sus promesas podrían resolver problemas que aquejan a la humanidad desde hace siglos, como curar enfermedades, mejorar la educación o prevenir delitos. Pero nada garantiza que sus frutos se distribuyan con equidad, o que sus potenciales daños no terminen afectando a los más vulnerables.
Siguiendo la alerta de Klaus Schwab, fundador del Foro Económico Mundial, nos encontramos inmersos en una “cuarta revolución industrial”, caracterizada por la convergencia de tecnologías y la difuminación de límites entre las esferas física, digital y biológica. En esta transición llena de caos, pero repleta de oportunidades, ChatGPT emerge como la primera ola de cambio. Ahora, como especie inteligente, recae en nosotros guiar sabiamente el futuro que se avecina
Twitter X: @dduzoglou