CARACAS.- La administración de Joe Biden anunció que aplazará la toma de medidas sobre Venezuela, hasta que se publiquen los datos oficiales detallados de las actas de votación, correspondientes a las elecciones presidenciales del domingo 28 de julio, en las que el Consejo Nacional Electoral (CNE), afín al régimen, declaró la victoria de Nicolás Maduro.
El portavoz de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jhohn Kirby señaló, en una rueda de prensa vía telefónica, que desde el Gobierno estadounidense existen «serias preocupaciones de que los resultados anunciados no parecen reflejar la voluntad del pueblo venezolano».
“Aguantaremos nuestras decisiones sobre Venezuela hasta que eso ocurra. Nosotros y el resto de la comunidad internacional estamos observando y responderemos en consecuencia», enfatizó. Estas decisiones incluyen la posibilidad de nuevas sanciones a la dictadura chavista por parte del Gobierno de Joe Biden.
Tras el acuerdo de Barbados, firmado en octubre de 2023 entre el gobierno chavista y la oposición, Washington suavizó algunas sanciones al sector petrolero venezolano. Sin embargo, el régimen de Maduro ha incumplido las condiciones acordadas sobre el proceso electoral, al tomar medidas de represión, inhabilitaciones políticas a líderes opositores y detenciones arbitrarias.
Estados Unidos había prometido levantar las sanciones a la dictadura chavista, si se celebraban elecciones justas y transparentes. Ante el fraude electoral y la resistencia de Maduro a abandonar el poder, la administración Biden contempla las sanciones como un punto de presión y su levantamiento depende del manejo de los resultados electorales.
Kirby manifestó que es absolutamente fundamental que cada voto se cuente de manera justa y transparente. Además, exhortó a las autoridades electorales venezolanas a compartir de forma inmediata la información con la oposición y a los observadores independientes a publicar un recuento completo y detallado de los votos.
Evalúan política de sanciones hacia Venezuela
Por su parte, durante otra conferencia telefónica con periodistas, dos altos funcionario del Departamento de Estado subrayaron la necesidad de que se publiquen los resultados de todos los colegios electorales. El primer funcionario sostuvo que «al participar en la represión y manipulación electoral, además de declarar un ganador sin los resultados detallados de las votaciones, precinto por precinto, los representantes de Maduro ha privado de cualquier credibilidad los supuestos resultados electorales anunciados».
Mientras que el segundo funcionario dijo que continuarán evaluando la política de sanciones hacia Venezuela, «a la luz de los intereses generales de la política exterior nacional de Estados Unidos, las acciones que toma Maduro y sus representantes, además de la dirección general del viaje, en lo que se refiere a nuestra política bilateral más amplia de Estados Unidos en compromiso con Venezuela”.
El Poder Electoral venezolano declaró ganador al oficialista Nicolás Maduro con el 51,20% de los votos (5.150.092), frente al 44,2% del abanderado de la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), Edmundo González Urrutia, con 4.445.978.
Mientras que la principal coalición opositora aseguró que tenía pruebas de que se trataba de un fraude electoral y aseguró que cuenta con más del 70% de las actas de votación, dando como resultado que el candidato opositor, Edmundo González Urrutia, obtuvo 6,274,182, para resultar victorioso por encima de Nicolás Maduro, quien según la información del comando de campaña, tuvo 2.759.256 votos.
La líder opositora, María Corina Machado, quien no pudo participar en el proceso por una inhabilitación política impuesta por el régimen, publicó una página web en la que fueron cargadas las actas de todo el país para que puedan ser verificadas.
Posición de EEUU y la comunidad internacional
Distintos funcionarios de Washington han insistido en la necesidad de una publicación inmediata y transparente de todas las actas electorales. El secretario de Estado Antony Blinken, ya había manifestado la madrugada de este lunes sus «serias preocupaciones» acerca del desenlace de los comicios electorales en Venezuela y de que los resultados anunciados no reflejen la voluntad de los venezolanos.
Blinken advirtió que la comunidad internacional está vigilante y que responderá «en consecuencia». «Es fundamental que cada voto se cuente de manera justa y transparente, que los funcionarios electorales compartan información de inmediato con la oposición y los observadores independientes sin demora y que las autoridades electorales publiquen las actas», afirmó.
Los resultados anunciados por el CNE desataron una ola de protestas en las calles de distintos estados de esa nación y reacciones de varios países de la comunidad internacional, entre ellos Argentina, Chile, Costa Rica, Perú, Panamá, República Dominicana, Uruguay y la Unión Europea, que han calificado de fraude electoral la reelección de Nicolás Maduro por seis años más.
Así como la convocatoria por parte del Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA) a una reunión extraordinaria, solicitada por estos países, para abordar los resultados del proceso electoral del domingo, que se llevará a cabo a este miércoles 31 de julio en la sede de la OEA en Washington, a las 3:00 pm.
@Lydr05
FUENTE: Con información de El País, La Voz de América y Monitoreamos