El próximo martes, 20 de agosto, iniciarán los vuelos patrocinados por Estados Unidos destinados a repatriar a los migrantes que atraviesen la selva del Darién, en la frontera entre Panamá y Colombia. Así lo anunció José Raúl Mulino, presidente de Panamá.
“El día 20 (de agosto comenzará el plan de regreso de migrantes)”, comentó Mulino durante una entrevista concedida a Univision Noticias, la cual fue distribuida a los medios por la oficina presidencial panameña desde República Dominicana, donde se encontraba Mulino por la toma de posesión de Luis Abinader.
El presidente reafirmó que los Estados Unidos financian estos vuelos de retorno de migrantes “sin costo alguno para Panamá porque (es) su problema, la frontera está en Darién no en Texas”.
El miércoles pasado, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, confirmó que su gobierno “está listo” para comenzar este mes de agosto el programa de repatriación en colaboración con Panamá, tras una conversación telefónica con Mulino, de acuerdo con un comunicado de la presidencia panameña.
Panamá y Estados Unidos establecieron el 1° de julio un acuerdo para repatriar a aquellos migrantes que cruzan el Darién, un área selvática fronteriza con Colombia que es frecuentemente usada como ruta migratoria hacia Norteamérica. Este convenio, financiado por Estados Unidos, cuenta con un presupuesto de 6 millones de dólares.
Mulino informó recientemente, el pasado 8 de agosto, que los vuelos de retorno de migrantes serán dirigidos hacia Colombia, como país fronterizo y punto de entrada para estos viajeros.
El propósito es disminuir el flujo de migrantes a través de la peligrosa selva del Darién, por la cual ya han pasado más de 216 mil migrantes este año, la mayoría venezolanos. En todo 2023, más de 520 mil personas han cruzado esta ruta, un número sin precedentes, según cifras oficiales de Panamá.
Desde el pasado 3 de julio, Panamá ha instalado “barreras perimetrales” (vallas de alambre con púas) a lo largo de 4,7 kilómetros en el Darién, donde había al menos cinco pasos no autorizados, con el fin de “canalizar” a los migrantes a través de un “corredor humanitario”. Según las autoridades, esto ha reducido el flujo migratorio en julio en comparación con el mes anterior.
Mulino ha advertido que el número de migrantes podría incrementarse dependiendo de cómo evolucione la situación después de las elecciones del 28 de julio en Venezuela, ya que la mayoría de los migrantes provienen de ese país.
Además, Panamá brinda asistencia y alimentos en los albergues situados en el Darién, permitiendo que los migrantes continúen su viaje en autobuses, financiados por ellos mismos, hasta Costa Rica.