PUERTO PRÍNCIPE.- La embajadora de Estados Unidos ante las Naciones Unidas, Linda Thomas-Greenfield, llegó este lunes a Haití para una visita oficial destinada a reforzar el apoyo internacional al país caribeño, que atraviesa una severa crisis de violencia y una compleja transición política.
Durante su visita de un día, Thomas-Greenfield se reunirá con el consejo presidencial de transición y con el recién nombrado primer ministro, Garry Conille, para discutir estrategias que fortalezcan la gobernabilidad y la seguridad en Haití. Este encuentro es especialmente significativo, dado que una misión de seguridad internacional está comenzando a establecerse en el país, con el objetivo de combatir las pandillas armadas que han sembrado el caos en las últimas semanas.
En un desarrollo reciente, una delegación de la policía de Kenia, que forma parte de la misión internacional respaldada por la ONU, inició patrullas en Puerto Príncipe. Esta misión, integrada por aproximadamente 2.500 efectivos, tiene como meta principal restaurar la paz y el orden en las áreas más afectadas por la violencia pandillera. Kenia asumió un rol de liderazgo en esta iniciativa, enviando cientos de agentes para apoyar en las operaciones de seguridad.
Violencia en Haití
Desde el asesinato del presidente Jovenel Moïse el 7 de julio de 2021, el poder de las pandillas ha crecido y se calcula que controlan hasta el 80% de la capital, Puerto Príncipe, y se han extendido a las zonas circundantes. El aumento de los asesinatos, las violaciones y los secuestros ha provocado un violento levantamiento de los grupos de autodefensa civiles.
La crisis en Haití se agravó a finales de febrero cuando las pandillas lanzaron ataques coordinados en la capital, declarando su intención de derrocar al entonces primer ministro Ariel Henry. Henry, cuya gestión se caracterizó por la falta de legitimidad electoral, renunció en abril, lo que permitió la formación de un gobierno de transición bajo la dirección de Conille.
De acuerdo con las agencias de la ONU, la violencia ha desplazado a 580.000 personas, más de la mitad de ellas menores de edad, y está causando que 4 millones de personas enfrenten inseguridad alimentaria.
Haití solicitó una fuerza internacional para combatir a las pandillas en 2022, y el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, hizo un llamado durante meses para que un país dirigiera la fuerza antes de que se presentaran los kenianos.
La visita de Thomas-Greenfield no solo busca fortalecer el respaldo internacional al gobierno de transición, sino también evaluar la situación humanitaria y de seguridad en el terreno. La embajadora tiene previsto visitar varias zonas afectadas y reunirse con líderes comunitarios y organizaciones humanitarias para coordinar una respuesta más efectiva a la crisis actual.
FUENTE: Con información de AFP y AP