CIUDAD DE MÉXICO – La entrega de 29 capos mexicanos del narcotráfico a Estados Unidos se produjo por razones de «seguridad nacional» y al margen del tratado de extradición entre los dos países, informaron este viernes la fiscalía y el gobierno de México.
El fiscal general, Alejandro Gertz, dijo a la prensa que el «traslado» se realizó de esta manera ante informaciones de que algunos jueces buscaban retrasar deliberadamente su envío a Estados Unidos, que los reclamaba por varios delitos.
Hasta ahora, la entrega de mexicanos solicitados por Estados Unidos ocurría al amparo de un acuerdo de extradición binacional y requería de un aval de la justicia para concretarse.
«Procedimiento extraordinario»
Pero el fiscal general y el secretario de Seguridad, Omar García Harfuch, explicaron que se recurrió a este procedimiento extraordinario al trascender reportes de que algunos de los 29 presos enviados el jueves incluso iban a ser «liberados».
«Existía un riesgo de que algunos de estos objetivos fueran liberados o siguieran atrasándose sus procesos de extradición, derivado de acuerdos con algunos jueces que buscaban favorecerlos, considerando que las actividades a las que se han dedicado representan una amenaza a la seguridad de nuestro país», explicó García Harfuch.
Entre las personas entregadas se encuentra Rafael Caro Quintero, «El Narco de Narcos», quien fundó el cártel de Guadalajara, ya extinto, y pasó varias décadas en prisión por el asesinato del exagente antidrogas Enrique «Kiki» Camarena en 1985.
Lea también: ONU insta al régimen de Maduro a informar sobre los casos de desapariciones forzadas.
FUENTE: Con información de AFP