CIUDAD DE PANAMÁ.- Marco Rubio, el secretario de Estado de Estados Unidos, llegó a Panamá en su primer viaje al extranjero como jefe de la diplomacia, en medio de tensiones entre ambos países.
Rubio da inicio a una gira de seis días que lo llevará también a El Salvador, Costa Rica, Guatemala y República Dominicana con una agenda centrada en el canal, la migración, la lucha contra el crimen organizado y la contención de la influencia de China en la región.
El secretario de Estado fue recibido por el canciller panameño, Javier Martínez-Acha, en el aeropuerto Panamá Pacífico, en el oeste de la capital, donde el avión abortó un primer aterrizaje tras fuertes vientos y unos minutos después logró tocar la pista.
Su viaje está precedido por las deportaciones de migrantes y las acusaciones de que China interviene en el canal de Panamá a través de Hutchison Holdings, empresa de Hong Kong que opera dos puertos en las entradas de la vía interoceánica.
Rubio visitará el canal de Panamá, según un funcionario estadounidense, y se reunirá con el presidente José Raúl Mulino el domingo.
El mandatario panameño ha negado que China ejerza el control sobre el canal. En medio de la polémica, las autoridades panameñas iniciaron una auditoría de Hutchison Holdings.
El Canal de Panamá
Poco antes de que llegara el vuelo del secretario de Estado, grupos de manifestantes quemaron banderas de Estados Unidos en el centro de la capital.
Para el domingo, cuando se realiza el encuentro de Rubio con Mulino, fueron convocadas más protestas en la capital, cuyas calles, edificios y plazas fueron adornadas con banderas panameñas para la ocasión.
Reconoció que el gobierno de Panamá «en general es proestadounidense», pero considera que el canal, por donde pasa el 40% del tráfico de contenedores de Estados Unidos, es un «interés nacional fundamental» para Washington.
«No podemos permitir que ninguna potencia extranjera, en particular China, tenga ese tipo de control potencial sobre el canal que tienen. Eso simplemente no puede seguir así», advirtió Rubio.
El enviado especial de Estados Unidos para América Latina, Mauricio Claver-Carone, dijo el viernes que la culpa no es de Mulino sino del expresidente panameño Juan Carlos Varela, quien en 2017, durante el primer mandato presidencial de Trump, rompió lazos con Taiwán a favor de China.
«No fue solo un reconocimiento diplomático. Literalmente abrió las compuertas y le dio activos estratégicos en toda la zona del canal a China», afirmó.
Acusó a Panamá de aumentar injustamente los pesajes para los barcos estadounidenses, pero Panamá asegura que el alza fue para las naves de todos los países ante la sequía, exacerbada por el cambio climático, que afectó el funcionamiento del canal.
FUENTE: Con información de AFP