En 2023, un récord de 243.481 personas obtuvieron la nacionalidad española por residencia, la cifra más alta desde 2013, marcando un posible fin al prolongado congestionamiento que muchos extranjeros enfrentaban en este último paso de su proceso migratorio.
La transformación se atribuye a la adopción de nueva tecnología de automatización para la revisión de expedientes.
Desde el Ministerio de Justicia, la directora general de Seguridad Jurídica y Fe Pública, Ester Pérez, revela en una entrevista con EFE que el avance se debe a la «robotización». Ahora, «varios robots» verifican los documentos para asegurar que los solicitantes cumplen con todos los requisitos necesarios, como el tiempo de residencia, las pruebas de idioma e integración, y la ausencia de antecedentes penales.
Pérez destaca que un robot «no se cansa» y es más preciso, reduciendo errores humanos y previniendo el fraude.
Según el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, la mayoría de los nuevos ciudadanos son mujeres de entre 35 y 49 años, siendo Marruecos, Venezuela y Colombia los principales países de origen.
La mayoría de los recién nacionalizados son de origen iberoamericano, con un total de 130.128 personas.
Para Lladitza Alvarado, una venezolana de 65 años, obtener la nacionalidad significó una gran estabilidad después de una larga espera. Aunque dudaba de ser aceptada por su edad y sueldo, el ‘sí’ que recibió en 2023 le permitió sentirse «muy feliz de pertenecer a España» y visitar a su nieta en Miami, a quien no veía desde hace casi una década.
La sensación de «estabilidad» y «tranquilidad» también la comparte Gerson Alexandrick Mejías, un venezolano que llegó a España en 2017 y obtuvo la nacionalidad tras recibir asilo por razones humanitarias.
El abogado Vicente Marín, con más de 25 años de experiencia en derecho de extranjería, observa una notable reducción en los tiempos de tramitación, destacando que muchos casos se resuelven ahora dentro del plazo legal de un año, y a menudo en mucho menos tiempo.
Shakira Palacios, de la asesoría Emigrando, también celebra la rapidez con la que sus clientes están logrando la nacionalidad, reduciendo la espera de hasta dos años y medio a apenas dos meses, y espera que esta mejora sea duradera.