LA PAZ.- El expresidente de Bolivia, Evo Morales, lanzó fuertes acusaciones este domingo contra el actual mandatario Luis Arce, sugiriendo que una farsa militar a la que que han denominado «intento de golpe de Estado» podría haber sido un autogolpe orquestado por el propio gobierno.
Arce niega el supuesto autogolpe. Las disputas entre los dos líderes del gobernante Movimiento Al Socialismo (MAS) se agudizaron después de que Morales anunció su intención de postular a las elecciones de 2025, en las que Arce podría buscar un segundo mandato. Inclusive, los analistas señalan que el gobernante ya está en campaña.
En tal sentido, Morales expresó su confusión y desconfianza hacia Arce, a quien acusa de engañar al pueblo boliviano y a la comunidad internacional. «Yo pensaba que era un golpe, pero ahora estoy confundido: parece autogolpe», comentó Morales, agregando que ha recibido información que lo lleva a pensar que Arce pretendía entregar el control del país a una junta militar para evitar su propio regreso al poder.
Evo Morales fue uno de los primeros en «denunciar» el levantamiento militar del pasado miércoles, en el que tropas lideradas por el excomandante del ejército, Juan José Zúñiga, sitiaron el palacio presidencial con tanques. Sin embargo, Morales ahora plantea dudas sobre la verdadera naturaleza de estos eventos, sugiriendo que Arce podría haber manipulado la situación para consolidar su poder.
Arce y Morales, quienes fueron aliados cercanos durante el largo mandato de Morales, ahora se disputan el liderazgo del Movimiento al Socialismo (MAS) de cara a las elecciones presidenciales de 2025, en medio de una crisis económica en el país y la pérdida de apoyo.
Morales también criticó el reciente nombramiento del general José Sánchez como comandante del ejército, señalando que estuvo involucrado en la planificación del supuesto golpe. Estas acusaciones se suman a las dudas ya planteadas por Morales sobre la veracidad de la versión oficial de los eventos proporcionada por el gobierno de Arce.
El mandatario dijo que “Evo Morales ya no es presidente” del Movimiento al Socialismo (MAS) y que “su mandato caducó en 2016”.
Zúñiga,quien actualmente está detenido, declaró que actuó bajo las órdenes de Arce para llevar a cabo acciones destinadas a aumentar su popularidad, afirmación que el presidente negó rotundamente. Mientras tanto, el gobierno arrestó a 21 personas, incluidos militares activos y retirados, así como civiles, por su participación en la sublevación.
El enfrentamiento en la plaza frente al palacio presidencial resultó en 14 civiles heridos por balines disparados por los militares sublevados, quienes se retiraron sin mayores enfrentamientos con las fuerzas leales al gobierno. Esta situación ha generado un clima de tensión y desconfianza, aumentando las dudas sobre la estabilidad política en Bolivia.
FUENTE: Con información de AFP