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Quienes la sufren enfrentan una batalla diaria contra la autocrítica, el miedo y la preocupación. Una experta en salud mental describe las pautas para una terapia y cómo establecer límites saludables
A veces es normal sentirse ansioso, especialmente en situaciones estresantes. Sin embargo, para algunas personas, la ansiedad excesiva y continua puede ser un desafío para controlar e interfiere con las actividades diarias.
Por Infobae
Existen varios tipos de trastornos de ansiedad. El término “ansiedad de alto funcionamiento” representa a personas con síntomas de ansiedad mientras mantienen un alto nivel de funcionalidad en diversos aspectos de sus vidas. A menudo, tienen éxito en sus carreras u otros roles, pero luchan internamente con sentimientos persistentes de estrés, dudas y miedo a no estar a la altura. Se sienten extremadamente incómodos por dentro y luchan con una autocrítica significativa.
La ansiedad de alto funcionamiento no se reconoce en el Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales, sino que es un subconjunto de la ansiedad generalizada. Muchos síntomas emocionales y físicos están asociados con el trastorno de ansiedad generalizada. Algunas personas con ansiedad de alto funcionamiento reflejan muchas de estas señales, pero ciertos aspectos pueden ser más prominentes.
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Algunos síntomas del trastorno de ansiedad generalizada incluyen preocupación y nerviosismo generalizado. Otros, pueden conducir a una ansiedad de alto funcionamiento que incluyen luchas internas con las siguientes situaciones:
– Miedos a la crítica o a la autocrítica significativa
– Miedos a parecer inadecuados o tontos ante los demás
– Sentirse al borde o a punto de perder el control
– Sensación de fatalidad inminente
– Estrés significativo
Es importante consultar a un profesional de la salud mental para hablar sobre los síntomas y obtener un diagnóstico preciso. Luego, si se determina que se tiene ansiedad de alto funcionamiento, se puede desarrollar un plan de cuidados para tener la mejor calidad de vida.
De esta forma, el asesoramiento y la terapia desempeñan funciones cruciales para ayudar a las personas con ansiedad de alto funcionamiento a controlar sus síntomas de forma eficaz.
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La terapia cognitivo-conductual puede ayudar a aprender a replantear los pensamientos sobre la vida y transformar comportamientos que pueden alimentar la ansiedad. En lugar de ser autocrítico y buscar qué podría salir mal, se le puede enseñar a la persona a gestionar sus pensamientos, buscar soluciones y guiarse a través de los sentimientos de ansiedad.
Además de la terapia, otras estrategias de afrontamiento para aliviar los síntomas incluyen:
– Creación de una red de apoyo. Las personas con ansiedad de alto funcionamiento pueden creer que deben lidiar solas con sus comportamientos porque temen las críticas o los resultados negativos. Una red de apoyo positiva de personas que se preocupan, independientemente de los resultados, puede ayudar a aliviar los síntomas de ansiedad.
– Establecer límites saludables. Esto puede ayudar a mejorar las relaciones con los demás y establecer reglas para uno mismo. A menudo se habla de la importancia de decir “no” como parte del establecimiento de límites. Esto se debe a que muchas personas se esfuerzan demasiado, pero algunas con ansiedad de alto funcionamiento también deberían aceptar decir “sí” a las oportunidades que amplían sus niveles de comodidad. Sus vidas crecen en experiencias y satisfacción cuanto más enfrentan sus miedos.
– Olvidar las comparaciones. Las personas con ansiedad tienden a compararse con los demás, sienten la necesidad de mejorar y quieren parecerse más a otra persona. La comparación puede privar de alegría y satisfacción.
– Identificar valores fundamentales. Algunas personas con ansiedad de alto funcionamiento se obsesionan con el éxito definido por la sociedad, como tener el trabajo, el automóvil, la casa y las posesiones materiales “adecuados”. A menudo, estos elementos sólo son importantes porque otras personas creen que lo son. Un terapeuta puede ayudar a descubrir lo que es importante para la persona fuera de las expectativas de la sociedad y alinear sus pensamientos y acciones con sus valores fundamentales.
– Aprender a aceptar las críticas. Esto puede resultar difícil para muchas personas, pero especialmente para quienes tienen ansiedad de alto funcionamiento. Es posible que se ponga a la defensiva. Un terapeuta puede ayudar a identificar formas de dar un paso atrás en este momento y evaluar la retroalimentación de manera neutral y sin emoción.
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