CARACAS.- El exministro de Energía y Petróleo y expresidente de Petróleos de Venezuela (PDVSA), Rafael Ramírez afirmó, que por primera vez en doce años, Venezuela tiene la posibilidad real de conquistar un cambio político con las elecciones presidenciales previstas para el 28 de julio.
En un artículo de opinión publicado por el Instituto Affari internazionali (IAI), Ramírez, quien se encuentra exiliado en Italia, acusado de corrupción por la justicia venezolana, aseguró que a pesar de que el proceso electoral se ha visto enmarcado en numerosas y graves irregularidades, la oposición mayoritaria encabezada por la líder opositora María Corina Machado y el candidato unitario Edmundo González Urrutia, tiene grandes posibilidades de alcanzar la victoria.
Destacó que en los últimos once años, Nicolás Maduro, quien pretende mantenerse en el poder por seis años más, ha llevado al país suramericano a la peor crisis de su historia, razón por la cual el descontento popular se ha extendido, generando que el 80% de la población venezolana espere un cambio político.
Trabas del régimen
Señaló que dado que este escenario es políticamente riesgoso para la cúpula chavista, han optado por tomar medidas para controlar el proceso y los resultados electorales. Sin embargo, las encuestas que reflejan la intención de voto a favor de la alternativa democrática y las movilizaciones masivas organizadas por los factores opositores sugieren que Maduro será derrotado electoralmente.
Recordó que entre los años 2015 y 2023, el régimen de Nicolás Maduro ha intervenido judicialmente a través del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de diferentes partidos que conforman la oposición venezolana, entre los que destacan Acción Democrática (AD), Primero Justicia (PJ), el Partido Socialcristiano COPEI, Voluntad Popular (VP). Además de algunos partidos afines al chavismo como el Partido Comunista de Venezuela (PCV).
Indicó que, además, tanto en el TSJ como el Consejo Nacional Electoral (CNE), controlado por el chavismo, ratificaron inhabilitaciones políticas dictadas desde 2019 contra dirigentes políticos tanto opositores como afines al chavismo que aspiraban competir en los comicios electorales, que originalmente se celebrarían en diciembre de este año y la dictadura chavista adelantó programándolas para el 28 de julio, día del cumpleaños del fallecido gobernante Hugo Chávez.
Entre ellos, la líder de Vente Venezuela, María Corina Machado, sobre quien el régimen impuso una inhabilitación política para optar a cargos de elección popular por 15 años, que le impidió participar en la contienda electoral, pese a resultar ganadora de las elecciones primarias opositoras celebradas en octubre de 2023, con más del 90% de los votos.
El liderazgo de Machado, quien se encuentra recorriendo el país haciendo campaña en apoyo al candidato de la oposición unitaria Edmundo González, se ha fortalecido reuniendo a miles de personas dispuestas a lograr el cambio político hacia la democracia en Venezuela.
Ramírez, quien después de haber estado en la cartera petrolera durante 12 años se ha convertido en fuerte crítico de Nicolás Maduro, mencionó que también se obstaculizó el Registro Electoral Permanente (REP) de los electores tanto fuera como dentro de Venezuela, a quienes no se les permitió el registro y cambio de dirección. Se estima que de los 3 millones de electores en el exterior sólo se registraron 508 nuevos electores y 6.000 pudieron cambiar su domicilio.
Posibles escenarios
Asimismo, auguró algunos posibles escenarios políticos de cara a las elecciones de julio, entre los cuales resaltó que si Maduro y su séquito se sienten acorralados, “aún pueden intentar impedir la candidatura de Edmundo González mediante la inhabilitación política, utilizando al CNE o al TSJ”, puesto que el proceso electoral no cuenta internacional, debido a que el CNE rechazó la presencia de misión de observación de la Unión Europea (UE).
Otra posibilidad sería que intenten suspender el proceso electoral, “en caso de que haya un apoyo mayoritario para la oposición, el régimen aún puede recurrir al fraude electoral, que podría provocar una movilización popular masiva en su contra”, añadió.
«En este escenario, el papel de las fuerzas armadas, que hasta ahora han sido fundamentales para apoyar a Maduro, así como el de la comunidad internacional, sería crucial para prevenir la agitación política», apuntó.
Por último, el también exembajador de Venezuela ante la Organización de Naciones Unidas (ONU), advirtió que será esencial un acuerdo político entre las diferentes fuerzas políticas de la oposición y el sector chavista para volver al verdadero espíritu de la Constitución, restablecer el Estado de derecho y abordar las inmensas necesidades de la población.
Las palabras del expresidente de PDVSA, quien fue hombre de confianza de Hugo Chávez, reflejan la división interna dentro del chavismo a pocas semanas de unas elecciones presidenciales que tendrán lugar en el marco de una severa crisis económica y el colapso de la industria petrolera, de lo cual culpa al régimen venezolano.
@Lydr05
FUENTE: Con información de artículo de opinión