El 18 de septiembre de 1810 la nación sudamericana celebró la formación de la Primera Junta Nacional de Gobierno, denominada “Junta Provisional Gubernativa del Reino”, hecho histórico que dio el primer paso en un Cabildo Abierto a la lucha independentista contra la corona española.
Sin embargo, la emancipación de Chile culminó en febrero de 1818 con la proclamación de su independencia, convirtiéndose en nueva república, luego de que Bernardo O’Higgins, considerado el padre de la patria y libertador, firmó la declaración de independencia definitiva en la ciudad de Talca.
El exembajador de Venezuela en Chile, Julio César Moreno León, explica en entrevista con DIARIO LAS AMÉRICAS que, a más de dos siglos de vida independentista, Chile está viviendo un momento político muy importante, “debido al hecho de que un candidato de izquierda haya ganado las últimas elecciones presidenciales realizadas en el país, que había liderado el movimiento social que cambió la historia de la democracia liberal a través de la violencia”.
Recuerda que el presidente Gabriel Boric intentó imponer una reforma constitucional en ese país, tras su triunfo en 2021, la cual fue rechazada dos veces «por el mismo pueblo que lo había apoyado y votó en contra de esta propuesta constitucional elaborada por defensores del legado del dictador Augusto Pinochet, primero en 2022 y luego en 2023, una situación atípica en América Latina”.
El diplomático sostiene que la decisión del gobierno del mandatario, surgido de la nueva izquierda chilena, de respetar la decisión, indica que en Chile «se mantienen vivas las libertades de aquella época independentista , y que el Estado chileno puede volverse a convertir en un espejo democrático como lo fue tradicionalmente”.
“Debido a las protestas que hubo en contra del Gobierno, Chile se quedó con la Constitución aprobada durante el régimen de Pinochet y modificada por los gobiernos democratacristianos de Patricio Aylwiny y luego durante el mandato Ricardo Lago, que realizó una de las más grandes reformas de la Constitución chilena”, expone.
Hacia la democracia
El exembajador asegura que hoy Chile está nuevamente encausado en el orden democrático, «al ser presidida por un izquierdista que ha marcado diferencia con la ideología de los regímenes socialistas de América Latina».
Moreno León, de tendencia socialcristiana que trabajó en Chile durante el gobierno del presidente Eduardo Frei Ruiz-Tagle, en 1994, identifica a Boric como un político “plenamente democrático”.
Considera que el actual Gobierno chileno, aunque es de izquierda, “ha evolucionado acorde con la realidad del país, convirtiéndose en un ejemplo de líder de izquierda democrática”.
Apunta que el presidente Boric, quien inició su gobierno en 2022, ha madurado políticamente, «porque sabe que no puede salirse del marco institucional democrático de los gobiernos democráticos que ha habido en Chile».
Fortalecimiento
“El Estado chileno debe ratificar la estabilidad y volver a ser un modelo democrático y generar un consenso político que le permita recuperar la justicia social iniciada por los partidos democráticos que tomaron el poder después de Pinochet”, añade.
También menciona la importancia de la recuperación de la economía y la solución de los principales problemas sociales que atraviesa ese país, “ente ellos, la migración masiva, que ha creado una serie de necesidades económicas y sociales que hacen más compleja la situación de la población chilena”.
Panorama político
En medio de un ambiente de incertidumbre, por factores que incluyen la crisis de inseguridad, la desigualdad social y económica, Chile se prepara para unas elecciones presidenciales previstas para noviembre de 2025, que se verán definidas por las elecciones municipales de alcaldes, gobernadores, concejales y consejeros, que se realizarán el último fin de semana de octubre próximo en todo el país.
Para Moreno, en los próximos comicios presidenciales, en los que el mandatario chileno Gabriel Boric no podrá participar debido a que la Constitución chilena no permite la reelección, es necesario que los ciudadanos elijan “a un candidato que ofrezca la estabilidad económica y democrática y garantice las transformaciones sociales que el país está necesitando”.
Desde el oficialismo, los posibles candidatos que destacan para tomar el mando de La Moneda en 2026, son la expresidenta Michelle Bachelet y la ministra del Interior, Carolina Tohá, mientras que en la oposición aparecen con ventaja la actual alcaldesa de Providencia, Evelyn Matthei, considerada la delfín de Sebastián Piñera, y el excandidato presidencial José Antonio Kast, quienes posiblemente se enfrentarán en las primarias internas para candidaturas, el 9 de junio del próximo año.
Moreno enfatiza que Chile fue un país democrático durante todo el siglo XX, “situación que se revirtió con la llegada al poder del socialista chileno Salvador Allende y la consolidación de su modelo comunista, luego de las dictaduras militares que predominaron en el país”.
FUENTE: ENTREVISTA