Aunque sus datos personales son confidenciales, ha trascendido que Santana Novoa cuenta con fecha de juicio inicial (máster hearing o audiencia preliminar) y deberá pelear su asilo ante un juez de Inmigración.
El viceministro, que ya no aparece en la página web del Ministerio cubano, había viajado recientemente a México a un evento regional sobre empleo de la Comisión de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) y, al unísono, estaba esperando entrar a los EEUU con cita aprobada del CBP-One.
De acuerdo con información verificada por Martí Noticias mediante revisión de documentos judiciales, el viceministro se asentará en Florida, justo donde se ha radicado por décadas la mayor comunidad de exiliados cubanos en el mundo.
La audiencia preliminar del exfuncionario está pactada para el 21 de agosto de 2026 a las 8:30 de la mañana en Orlando, Florida y ante el juez Benjamín Rosen, según muestra el sistema de la Corte de Inmigración de EEUU, disponible en línea.
En un primer momento los medios locales manejaron información relativa a la detención del viceministro y la preocupación de sus familiares en EEUU, donde viven sus dos hijos de acuerdo con el investigador Luis Domínguez, de la Fundación para los Derechos Humanos en Cuba.
No obstante, el ex alto dirigente del régimen fue puesto en libertad tras su inspección. Sin embargo, al entrar al territorio estadounidense vía Nogales, Arizona, ocultó todo lo relativo a su puesto en el gobierno cubano. Así lo aseguraron a Martí Noticias fuentes del gobierno de EEUU bajo condición de anonimato por no estar autorizadas a dar información de casos específicos.
Santana Novoa se suma a la creciente lista de funcionarios castristas que, después de años trabajando para el régimen en el poder, buscan retirarse en Estados Unidos, la llamada ‘Tierra de la Libertad’.
Para el abogado de Inmigración Wilfredo (Willy) Allen, queda claro este comportamiento que explica con una metáfora tajante: “¿qué es lo que sucede cuando un barco se está hundiendo? Pues que las ratas se van, buscan salida”.
Con lo que no comulga Allen es con que estos personajes vengan específicamente a la vibrante comunidad construida por el exilio histórico a disfrutar de los beneficios conseguidos por quienes sufrieron persecución, amenazas, saqueo de sus propiedades y hasta cárcel a manos del castrismo.
No obstante, Allen refiere que, en estos casos de solicitud de asilo en la frontera, a diferencia de quienes entran por parole humanitario, la persona desde que se presenta está mostrando su cara, quién es y se está «arrepintiendo» o al menos asumiendo que fue parte de un régimen opresor.
Aunque es importante hacer la salvedad de que todos tienen derecho a pedir asilo, –explica Allen–, se trata de un victimario más que tomó la decisión afirmativa de formar parte de las filas de organizaciones comunistas y de la cúpula castrista.
No hay que pasar por alto que este viceministro representó al poder castrista y lo que esto supone en términos de violaciones de derechos laborales, sobre todo en relación con los médicos cubanos considerados esclavos modernos.
A estos y a otros profesionales que prestan servicios en el exterior bajo la bandera cubana con la mano turbia del régimen, no sólo no se les pagan salarios justos, sino que también se les restringen sus derechos humanos al ser privados de sus pasaportes y con ellos de la libre movilidad.
El Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS por sus siglas) es, por otra parte, el que permite a que a profesionales cubanos desafectos del régimen se les invaliden títulos ganados con esfuerzo y estudio constantes, al tiempo que posibilita la explotación laboral de jóvenes recién graduados obligados a prestar Servicio Social que se torna Servicio Político.
La defensa
La abogada de Inmigración Laura Jiménez explicó a DIARIO LAS AMÉRICAS que “independientemente del historial de esta persona como un alto funcionario del régimen cubano, bajo la Ley de Asilo de los Estados Unidos, él tiene el derecho de ser escuchado; tiene el derecho de defender su caso de asilo y de que un juez tome una decisión sobre si él cumple con los elementos necesarios para que un asilo sea aprobado a su favor, ya sea por una persecución pasada que no creo que haya sido el caso de él o, en un caso más concreto, de una persecución futura”.
Ahora bien, -consideró la Dra. Jiménez- para poder ganar un asilo en un caso como el de Santana Novoa, se tiene que probar que él no fue un perseguidor y un represor; y es una situación muy difícil en un caso como este porque es bien conocido que las personas en Cuba son reprimidas, despedidas y sancionadas en su trabajo por su opinión política. Son incluso limitadas a buscar trabajos dentro del sector estatal en Cuba y muchas veces son perseguidos cuando van a buscar trabajo en el sector privado como cuentapropistas.
“En mi opinión, va a ser un caso muy difícil de defender porque cómo esta persona va a poder comprobar que no emitía estas órdenes o no seguía estas leyes administrativas laborales en Cuba y no era uno de los titulares a cargo de reprimir a trabajadores en Cuba solo porque expresaban de manera pacífica, sin violencia y ejerciendo su derecho a la libre expresión, su opinión en contra de las violaciones del gobierno (…) Esta persona [el viceministro Santana Novoa] evidentemente en un punto va a tener que contratar un abogado si quiere llegar a algún lugar porque un caso como el suyo levanta la presunción precisamente de que él no es una persona que califica para asilo, porque es una persona que estaba de manera voluntaria ejerciendo un puesto oficial bajo órdenes y bajo el mando de los funcionarios del régimen”.
En este sentido, el abogado Santiago Alpízar, una de las voces fundamentales de Cuba Demanda Inc., organización legal sin ánimo de lucro que alerta sobre violaciones de derechos humanos en Cuba, dijo a este diario que, de facto, Santana Novoa no es elegible para esta clase de beneficio migratorio en Estados Unidos por el hecho mismo de haber pertenecido al Partido Comunista y, como tal, debería ser denunciado. Indicó varias vías para hacerlo, ya sea mediante la organización a la que él representa o directamente ante el Departamento de Estado, el Buró Federal de Investigaciones (FBI), el Departamento de Justicia y el Departamento de Seguridad Nacional.
“Si fuiste miembro del PCC, si fuiste una persona que actuó en contra de los derechos humanos de otra persona, no eres elegible para ningún beneficio de tipo migratorio en los Estados Unidos. Esta es una cuestión estrictamente legal”, acentuó.
En cualquier caso, los asilos son estrictamente confidenciales y hay una regla de confidencialidad que el gobierno de Estados Unidos respeta mucho y es que no se comparte la información que él provee en su asilo con ninguna tercera persona, precisó la Dra. Jiménez, quien tiene amplia experiencia en la defensa de casos de asilo ante la Corte.
Ante la pregunta de si asumiría un caso como este, la abogada sostuvo que, antes de tomar cualquier decisión a priori, ella se entrevistaría con el sujeto: “Es un caso en el que yo me entrevistaría con él y me gustaría escucharlo. Me gustaría escuchar su historia. Me gustaría escuchar por qué salió de Cuba de la manera que salió y por qué se presentó de la manera que se presentó en frontera. He leído que tiene familia aquí, que incluso tiene hijos aquí.
“Existe también muchas veces este fenómeno de la doble moral en Cuba, pero también existe el fenómeno de que muchas personas son forzadas a mantener esta doble moral o esta doble fachada política por temor precisamente a que tomen medidas más estrictas. Hemos visto que el régimen ha adoptado medidas contra algunos ministros y funcionarios del Estado, encarcelándolos, dejándolos en prisión domiciliaria, quitándole el derecho a todos los servicios sociales, pero hay que ver cuál es la historia del viceministro [Santana Novoa], me gustaría escucharla”, destacó.
Más allá de la Corte de inmigración o del propio Departamento de Estado, habrá que ver qué pasa con este caso y si esta persona logra argumentar que no fue un perseguidor y no fue un represor, concluyó la abogada. El régimen de La Habana, de momento, ya ha tomado algunas medidas: inmediatamente, el perfil de viceministro fue borrado de Ecured, la «Wikipedia cubana» y de la página del MTSS, si bien permanecen su bio y fotografía en la página web del evento de CELAC en el que participó en México.
Se trata de la I Cumbre Técnica de las Comisiones Americanas de Seguridad Social, encuentro de discusión sobre la informalidad laboral en el continente a través de un Seminario Técnico.
De acuerdo con su perfil de ponente en la web de la Conferencia Interamericana de Seguridad Social (CISS), Juan Carlos Santana es Licenciado en Economía y en Administración pública, Especialista en contabilidad y Auditoría y además cuenta con un diplomado en Modelación Económica como Herramienta de la Dirección de la Economía obtenido en la República Popular China.
“El especialista Santana tiene más de 30 años de experiencia profesional (…) se ha desempeñado como director Económico en el Ministerio de la Agricultura, en el Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos, en la Oficina Nacional de Inspección del Trabajo y también en el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, donde actualmente se desempeña como viceministro. Además, es asesor y consultor de los miembros del organismo en las Juntas de Gobierno y es parte del grupo de estabilización macroeconómica”, se lee. Olvidaron reescribirlo en tiempo pretérito.